El exministro de Sanidad y líder del PSC, Salvador Illa, ha asegurado que solamente vio en una ocasión al asesor del exministro José Luis Ábalos, Koldo García, y ha sostenido que es "falso" que su ministerio comprase a la principal empresa investigada en la trama, Soluciones de Gestión.
Illa ha negado haber mantenido contactos con las empresas investigadas en el caso Koldo durante su comparecencia en la comisión de investigación del Congreso de los Diputados que analiza presuntas irregularidades en la compra de material sanitario durante la pandemia.
"No autoricé ninguna compra de nada. Mi ministerio no contrató con Soluciones de Gestión, no sé si decirlo en latín", ha recalcado Illa ante las continuadas preguntas del dirigente del PP Elías Bendodo, que en su respuesta le ha acusado de mentir.
Sobre la Unión Temporal de Empresas (UTE) que Ferrovial constituyó con Soluciones de Gestión para optar a contratos de Sanidad, el exministro ha explicado que formar parte "de un acuerdo marco" que el Ministerio firmó con esta UTE "no es contratar con esta empresa".
Ha insistido en este sentido que ni una sola de las comunidades autónomas que se adhirieron al acuerdo marco contrató con esta empresa de la trama Koldo.
Illa ha entregado un documento a los diputados en el que consta que un juzgado de Madrid archivó una querella de Vox y sostuvo que la forma de contratación fue "ajustada a Derecho" y en su comparecencia ha defendido que su Ministerio ha pasado sin ningún reproche un total de 72 actuaciones de investigación y ha negado las supuestas irregularidades por las que le ha preguntado el PP.
En concreto, Bendodo ha preguntado por la compra de respiradores a las empresas Escribano Mechanical and Engineering y Hersill, preguntando si el Ministerio pagó comisiones porque cada respirador le costó más de 7.210 euros, mientras que la Comunidad de Madrid compró cada respiración, solo a Hersill, por 5.620.
Illa ha negado que se pagase comisión alguna, ha explicado que ambas empresas se aliaron para fabricar respiradores en conjunto y ha apuntado que en otros casos fue la Comunidad de Madrid la que pagó más que el Ministerio.
El exministro también ha negado que fuese cesado en 2009 de la Dirección General de Infraestructuras de la Generalitat de Cataluña por haber inflado las obras de la Ciudad de la Justicia de Barcelona, como había sostenido Bendodo, y ha dicho que no hubo cese por "ningún sobreprecio" sino que fue relevado a petición propia.
Pese a las palabras de Illa, el PP ha aludido a la Fiscalía para defender que Sanidad sí contrató con la empresa investigada y le ha dicho al exministro que al reconocer que se vio con Koldo García "está reconociendo contactos con la trama". "Eso es un escándalo", ha recalcado Bendodo.
El PP ha argumentado que sin Illa al frente de Sanidad las irregularidades que se investigan no hubieran existido, ha acusado al exministro de ser un "coladero de empresas pirata y de la trama PSOE" y le ha advertido: "Usted, señor Illa, tiene a la Justicia pisándole los talones".
Vox ha puesto el foco en criticar su participación "en un recorte masivo de derechos fundamentales nunca antes visto" más allá de que gestionase mejor o peor unos cientos de miles de euros, según ha señalado su portavoz en la comisión, Carlos Flores.
Illa ha reiterado que el estado de alarma "salvó vidas" aunque el Constitucional declarase inconstitucional algunos preceptos de la medida por considerar -ha recordado- que el procedimiento que se debería haber utilizado debió ser el estado de excepción.
El exministro ha llegado a la comisión de investigación del Congreso arropado por el secretario general de las Cortes, Rafael Simancas, el portavoz del grupo socialista, Patxi López, y por todos los diputados del PSC.