Así lo confirmó ayer el portavoz vaticano, Federico Lombardi, a través de un comunicado de prensa, en el que explicó que el secretario de Benedicto XVI manifestó a la joven el interés del Pontífice por su “situación”.
No obstante, Lombardi no precisó el día en que tuvo lugar la visita y señaló que ésta fue “en los pasados días”.
Lombardi se refirió además al procedimiento iniciado por la magistratura del Estado de la Ciudad del Vaticano por el incidente y aseguró que éste “seguirá su curso hasta su cumplimiento”.
Maiolo, que aseguró que no quería hacer daño al Pontífice, llegó a Roma desde Suiza, donde residía, para asistir a la Misa del Gallo, y una vez dentro de la basílica de San Pedro logró saltar una de las vallas con las que se crea un pasillo en el interior del templo para que pase el Papa.
A pesar de la intervención de la seguridad vaticana logró llegar hasta Benedicto XVI, agarrarle el palio, hacerle perder el equilibrio y caer al suelo.
Desde el pasado 25 de diciembre la joven está en el hospital Angelucci de la localidad de Subiaco, cercano a Roma.
Los médicos que la atendieron tras la agresión aseguraron que se trata de una persona con “problemas psíquicos” y con un “pensamiento inestable”, que fue lo que la llevó a intentar en dos ocasiones a acercarse al Pontífice Benedicto XVI.