Juanma Moreno da un paso más en su estrategia de ensanchar su base electoral y, tras absorber Ciudadanos, ahora comparte un acto con el fundador del Partido Andalucista, Alejandro Rojas-Marcos, para relanzar su perfil andalucista. “Lo dije y lo mantengo: primero está Andalucía y luego mi partido. El liderazgo y el poder andaluz lo hacemos entre todos, desde la transversalidad”. Palabras de Moreno en la Casa Museo de Blas Infante, en Coria del Río (Sevilla).
El presidente andaluz mantuvo complicidad y empatía con Rojas-Marcos durante la presentación del libro Por un Poder Andaluz. El más claro ejemplo es que Rojas-Marcos le arrancó el compromiso de declarar el 4 de diciembre como el Día de la Bandera de Andalucía. Ese fue el día “más importante de expresión del pueblo andaluz” cuando cientos de miles de andaluces inundaron las calles de la verdiblanca para reclamar la autonomía plena.
Para Rojas Marcos, esta es la gran fecha del pueblo andaluz y no el 28 de febrero, que en el Estatuto de Autonomía se recoge oficialmente como el Día de Andalucía. “Quiero levantar la voz en favor de esa fecha”, comentó.
Moreno, en su intención desde hace años de apelar al andalucismo, reivindicó la herencia del desaparecido Partido Andalucista, que ha “impregnado” al resto de partidos actuales, también al centroderecha.
Moreno abogó por el “empoderamiento” de los andaluces, por crear “un poder andaluz” que sea transversal, desde todas las instancias, en el que participe la sociedad y también estén presentes los sindicatos.
“Seguimos sin influir, no puede ser que seis diputados de una comunidad concreta condicionen y determinen políticas para el conjunto", denunció Moreno en referencia al PNV.
Rojas Marcos destacó que la presencia de Moreno en este acto suponía hacer “alta política”, a pesar de las diferencias entre ambos, y resaltó que el PA no existe en la lucha electoral pero “su testamento sigue abriendo camino”.
Andalucismo de izquierda
Este acto contó con el malestar de Teresa Rodríguez, líder de Adelante Andalucía, que aseguró que el andalucismo “solo puede ser de izquierda” y rechazó que PP y PSOE, partidos con sede en Madrid, utilicen el andalucismo solo como herramienta electoral para “cazar” votos en las elecciones.
