La intervención de Griñán ante el Parlamento no estaba anunciada -desde el Gobierno andaluz se había dicho que era la consejera de Economía la que preparaba el debate general sobre la crisis-, por lo que cogía de sorpresa a la oposición, aunque le daban la bienvenida, toda vez que desde hace dos meses no se celebraba ningún pleno en la Cámara.
Griñán no eludió los datos de la crisis y reconoció los “muchos asuntos que quedan por resolver”, aunque con “cautela” consideraba que Andalucía entra ya “en la rampa de salida de la recuperación”, por lo que el camino es mejorar la competitividad de la economía. Aunque pidió el apoyo de los grupos a las medidas que planteó, cuestionó las recetas que la oposición le planteaba y volvió a polemizar con el presidente del PP-A, Javier Arenas, sobre las propuestas que plantea pero no aplican las comunidades autónomas populares.
Así, propuso a la Cámara un paquete de medidas fiscales “progresivas” para reactivar la economía -incluyendo subidas y bajadas de impuestos-, doce proyectos vinculados a la futura Ley de Economía Sostenible -centrados en sectores como el agroalimentario, el turístico o el de las renovables, y tres proyectos específicos destinados a los jóvenes, la construcción y la liquidez a las empresas.
En el capítulo fiscal, el grueso de las medidas van destinadas a estimular la actividad empresarial mediante incentivos, deducciones del IRPF para autoempleo (hasta 400 euros y 600 si se tiene más de 45 años) y por compra de activos de empresas (20% de la inversión); y del impuesto de sucesiones y donaciones (hasta el 99% en transmisión de negocios y aportaciones económicas para constitución o ampliación de empresas).
Las completan medidas de progresividad fiscal, incrementando en un 8% el gravamen para transmisiones patrimoniales considerados de alto valor (artes y antigüedades, entre otros).
En cuanto a los tres programas específicos, el primero de ellos se destina a un programa para jóvenes de 18 a 22 años para realizar un itinerario personalizado para su inserción laboral, incluyendo becas de hasta 420 euros, programa que tendrá un coste total de 23,2 millones de euros.
El segundo se dirige a reactivar la confianza entre empresarios y sindicatos, a través de un instrumento financiero similar a un programa de factoring, y el tercero, al sector de la construcción, a través de un programa de renovación urbana, mejora de la movilidad y eficiencia energética de las ciudades.
El presidente andaluz defendió la necesidad de mantener el compromiso de la estabilidad presupuestaria y vigilar el nivel de endeudamiento público de cara al futuro, aunque señaló que discutirán con el Gobierno central que todas las comunidades autónomas tengan que reducir su deuda hasta el 3% del PIB en 2013 con el mismo esfuerzo, “porque no todas hemos hechos los deberes de igual forma”, ya que Andalucía debe actualmente el 6% de su PIB y otras el 13%.
A pesar de la llamada al consenso, el PSOE finalmente no apoyó ninguna de las 25 propuestas presentadas por el PP y sólo aprobó una de IU, referida a la potenciación de las becas 6.000 para impedir el abandono temprano de la educación de los jóvenes, una medida puesta en marcha en este curso por los socialistas.
También la mayoría socialista tumbó las propuestas de ambos grupos para que se liquide la deuda histórica en metálico o las populares centradas en la reducción de altos cargos o la reorganización de la estructura burocrática de la Junta de Andalucía.
Arenas plantea sus medidas ante la “empanada mental” del presidente
El grupo popular planteó ayer una serie de propuestas de resolución para combatir la crisis económica -como la reducción de impuestos y del gasto corriente del Gobierno- ante las medidas presentadas por el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, que calificó como una “empanada mental”.
Durante su intervención en el debate general del pleno parlamentario, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, criticó a Griñán por haberse limitado, en su opinión, a subir los impuestos, aumentar el gasto corriente y las deudas y a reducir las inversiones y el desempleo.
“Ustedes están jugando al escondite con los parados andaluces y su único plan de empleo consiste en maquillar las listas de paro”, expresó Arenas, que sin embargo manifestó la intención de su partido de “ayudar al gobierno para salir de la crisis”.
En este sentido, presentó una batería de propuestas de resolución, entre las que se encuentra una reducción del gasto corriente basada en un recorte en el número de Consejerías, de altos cargos del gobierno andaluz y de delegados provinciales de la Junta.
Además, planteó desarrollar políticas activas de empleo que incluyan planes específicos de empleo juvenil (donde se registra una tasa de paro del 45%) y femenino (cuya tasa de desempleo triplica a la europea en Andalucía).
A lo anterior se suma una “reforma educativa de calado” que pase por el aumento de inversión en este ámbito, un acuerdo en materia de agricultura, una reducción de impuestos “pensando en las familias, desde el rigor, sin contradicciones ni complejos”, y un pacto entre gobierno y oposición para desarrollar el Estatuto de Autonomía.
Arenas también lamentó que desde hace 70 días no se haya convocado ningún debate parlamentario, en su opinión algo “absolutamente incomprensible” teniendo en cuenta la situación de desempleo, y planteó reformar el reglamento de la cámara con el fin de que el Parlamento sea “la casa de las preocupaciones de los andaluces”.
Valderas pide un cambio de ritmo hacia lo social
El coordinador regional de IU, Diego Valderas, se mostró ayer dispuesto al acuerdo para luchar contra la crisis económica pese a la “desconfianza” en la trayectoria de la Junta, pero planteó un “cambio de rumbo” para que se apueste por una política de “lo social y la intervención pública”.
En su intervención en el debate general sobre la crisis económica celebrado en el Parlamento andaluz, Valderas lamentó que se pida confianza tras las medidas planteadas por la Junta “sin que hayan surtido ningún resultado positivo”, y advirtió de que mientras no se cree empleo no habrá salida a la crisis andaluza.
Volvió a plantear al Gobierno andaluz que cambie el modelo económico y salir “de las garras” de los compromisos de la Unión Europea, y reiteró que las medidas aplicadas por la Junta que no han tenido ninguna repercusión, y mientras “ha dejado al margen” una serie de propuestas de IU sobre intervención pública.
Valderas indicó que su partido respalda algunas de las medidas fiscales planteadas por Griñán, aunque señaló que echaba de menos otras como la fiscalidad ecológica, una materia que requiere de un “impulso mucho más fuerte” para salir en mejores condiciones de la crisis.
Tras insistir en la necesidad de que haya una mayor intervención en el sector público, el coordinador regional de IU se comprometió a “arrimar el hombro” pero siempre que este se haga “en el marco de un acuerdo de la izquierda y desde la izquierda” con el fin de sacar de la crisis a los que más la sufren.
Según Valderas, sin un elemento mas social, con giro a la izquierda y más intervención pública “no se va a solucionar la crisis”, advirtió.
