El precio máximo de la bombona de butano de 12,5 kilogramos bajará un 4,96% a partir de este martes, 15 de noviembre, hasta situarse en 18,58 euros, según una resolución publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Este precio se mantendrá hasta el próximo 17 de enero, cuando se produzca la próxima revisión.
El precio máximo de venta de los gases licuados del petróleo envasados (GLP) en envases de entre 8 y 20 kilogramos, la tradicional bombona de butano, no se encuentra liberalizado. Su valor se revisa bimestralmente el tercer martes del mes, por resolución de la Dirección General de Política Energética y Minas.
La caída que se registrará en el precio a partir de este martes se debe a que este bimestre la cotización de las materias primas ha sufrido un descenso del 10,0%, a pesar de que el coste de los fletes ha tenido una gran subida (+24,0%) y el dólar ha continuado apreciándose respecto al euro (+2,8%), según indicaron en fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
La revisión bimensual del precio se calcula en función del coste de la materia prima (propano y butano) en los mercados internacionales, así como del coste de los fletes (transporte) y la evolución del tipo de cambio euro-dólar. Por otra parte, dicha revisión del precio, al alza o a la baja, está limitada al 5%, acumulándose el exceso o defecto de precio para su aplicación en posteriores revisiones.
El Real Decreto-Ley 11/2022, de 25 de junio, por el que se adoptan y se prorrogan determinadas medidas para responder a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania, para hacer frente a situaciones de vulnerabilidad social y económica, y para la recuperación económica y social de la isla de La Palma, congeló el precio máximo antes de impuestos de los GLP envasados entre 8 y 20 kg, tomando como referencia el establecido por la Resolución de 12 de mayo de 2022, de la Dirección General de Política Energética y Minas.
El GLP envasado es una mezcla de hidrocarburos, principalmente compuesta de butano, que sirve como alternativa al gas natural para su consumo energético en envases a presión, especialmente en poblaciones o núcleos urbanos sin conexión a la red de gas natural.
Actualmente se consumen 68 millones de envases de GLP de distintas capacidades, de los cuales 53 millones se encuentran sujetos al precio máximo regulado (el 78%). Se trata de un combustible en retroceso, ya que desde 2009 a 2018 el consumo total de GLP envasado ha descendido un 20%.