El próximo 22 de junio acaba el plazo para que la Junta presente al Gobierno el plan de reestructuración del sector público andaluz, una iniciativa que está coordinando "al detalle" con las distintas consejerías la titular de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo.
Según ha expuesto en rueda de prensa, el plan de reestructuración se basará en ejes como la concentración, la búsqueda de sinergias o evitar duplicidades, lo que permitirá -ha apuntado- disminuir alquileres, rebajar el gasto corriente y una mayor productividad.
Igualmente, y para incidir en el compromiso de "austeridad", se centrará en la simplificación periférica de las estructuras, lo que para la consejera redundará en "beneficio" de los ciudadanos, que pueden ver más claramente los servicios que presta la Junta a través de un instrumento "tan valioso" como es el sector público empresarial.
Martínez Aguayo ha destacado también el criterio de mejorar la gobernanza de las empresas públicas como tercera línea de trabajo.
Respecto al empleo, ha comentado que para la Junta es un elemento de "consolidación fiscal" del sistema.
Después de detallar que la Junta agotará el plazo previsto para presentar el plan, la consejera se ha mostrado partidaria de abordar la reestructuración con el "sosiego y el rigor suficiente" que permita tomar las decisiones "más adecuadas".
Preguntada sobre el aumento del número de asalariados públicos en la Junta, ha respondido que Andalucía cuenta con un nivel de empleo público con una dimensión "razonable que resiste cualquier comparación" con países del entorno.
En este sentido, Martínez Aguayo ha criticado la "demagogia" del PP sobre la dimensión y el coste del sector público andaluz y le ha reprochado que intente "demonizarlo cuando es muy eficaz" en la prestación de los servicios.
"El sector público nos cuesta lo que queremos que nos cueste", ha apostillado la consejera.
