Manuel Recio compareció ayer en la comisión de Empleo del Parlamento andaluz para explicar la nueva orden de incentivos para los autónomos, publicada en el BOJA el pasado martes, y aprovechó, ante la pregunta del diputado del PP, para negar que el Servicio Andaluz de Empleo se vaya a privatizar, si bien avanzó que se hará una reforma para convertirlo en un "organismo moderno y al servicio de la empleabilidad", con el objetivo de que "desaparezcan las colas" de las oficinas y se dé un servicio de máxima calidad.
Subrayó el compromiso de la Junta con el colectivo de autónomos, compuesto por 472.091, que sitúan a Andalucía en la segunda comunidad con más trabajadores por cuenta propia afiliados al régimen de autónomos de la Seguridad Social.
La nueva orden destina este año a los autónomos incentivos por valor de 34,3 millones, que sumados a los 12,7 millones que se están tramitando correspondientes a la convocatoria de enero de 2010, arrojan unas ayudas totales de más de 47 millones.
Asimismo, indicó que en marzo pasado la Junta abonó ayudas a los autónomos de catorce millones, correspondientes a las convocatoria segunda y tercera de 2009.
El consejero resaltó que la nueva orden es "más ambiciosa en términos económicos y cualitativos" que las anteriores y señaló que se dirige especialmente a actividades potencialmente generadoras de empleo vinculadas a la economía sostenible, a la dependencia y a la rehabilitación de viviendas.
El tope máximo de las ayudas se ha fijado en 11.000 euros y, en general, se da prioridad a los menores de 30 años, a las mujeres, a los mayores de 45, a los parados de larga duración, a las víctimas de violencia de genero y a los desempleados procedentes de regulaciones de empleo.
El diputado del PP José Olaiza denunció que se han reducido un 30% las ayudas totales, ya que en 2009 se destinaron 76 millones, y, además, en las últimas convocatorias sólo se ha cubierto el 17,5% de las solicitudes (un total de 17.849) y, por tanto, se ha quedado fuera el 83%.
"Estos datos acreditan que el plan se queda corto" y, de hecho, sostuvo que el anterior plan Mas Autónomo "demostró que cien millones en dos años era insuficiente".
También criticó que la primera y la segunda convocatoria de 2009 se ha tardado en resolver nueve meses cuando el período máximo establecido es de seis meses y defendió la necesidad de apoyar a este colectivo ante la desaparición de 54 autónomos al día.
El consejero negó recortes en las ayudas porque la nueva orden incluye la prestación en servicios y asesoría técnica y cuya valoración económica no se hace, argumentó.
