Este techo de gasto se apoya en unas previsiones de ingresos públicos en términos de Contabilidad Nacional que se situarán en los 104.539 millones de euros en términos de Contabilidad Nacional y un ajuste de contabilidad nacional de 21.186 millones de euros.
Este techo presupuestario llevará a las administraciones públicas (Estado, Seguridad Social, comunidades y ayuntamientos) un déficit del 6% del PIB en 2011. El déficit del Estado se situará en el 2,3%; el de las comunidades autónomas, en el 3,3%; y el de los ayuntamientos en el 0,8%. Para la Seguridad Social, se estima un saldo positivo del 0,4%.
Según indicó la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, este techo de gasto "va en la línea de la necesaria austeridad" de las cuentas públicas.
Además, indicó que supone "un gran esfuezo de contención" y es el que exige la situación y la responsabilidad del Gobierno, a la que, según aseguró, el Ejecutivo "no va a renunciar nunca".