El Consejo de Seguridad se refería al ataque hecho por Corea del Norte a la corbeta surcoreana en marzo pasado, que dejó 46 muertos entre la tripulación, de 104 personas.
El máximo órgano de decisiones de Naciones Unidas aprobó por unanimidad una declaración en la que consideró que “ese incidente pone en peligro la paz y la estabilidad” de la Península de Corea y de la región del noreste asiático, al tiempo que alienta al diálogo directo para resolver los problemas.
En respuesta a la decisión del Consejo, el embajador norcoreano Sin Son Ho, dijo en conferencia de prensa que su país “está dispuesto a reanudar el diálogo de paz y las negociaciones a seis bandas” entre las dos Coreas, EEUU, China, Japón y Rusia para el desmantelamiento del programa nuclear coreano. Tras el ataque, Gobierno de Seúl encargó una investigación internacional.