Las más habituales son indigestiones pesadas e intoxicaciones alimentarias. El otro gran peligro es el consumo excesivo de alcohol, que puede derivar en cuadros graves de intoxicación etílica , sobre todo entre los jóvenes. Aunque lamentablemente éste no es un problema exclusivo de la Navidad y no sólo afecta a la salud física sino que también aumenta la probabilidad de accidentes de tráfico.
No olvide que el excesivo consumo de alcohol, por sus efectos tóxicos a corto plazo y nefastas consecuencias en todos los ámbitos, es especialmente desaconsejable, en cualquier caso. Todas las personas, tanto las sanas como las enfermas o más vulnerables, deben controlar los excesos de alcohol en estas fechas, ya que sus consecuencias son, en muchos casos, irreparables.
Pautas a seguir
- Es muy importante beber con moderación, sin superar los 300 centilitros de vino al día, que equivale a 35-40 gramos de alcohol puro, según la graduación del vino. Los gramos pueden controlarse si se multiplica los grados de la bebida, que son los gramos de alcohol por cada 100 cc, por la cantidad que tomemos. Por ejemplo, cuatro cañas de 250 cc de 5% de alcohol tendrán 4 x 250 x 5 / 100 = 50 gramos En el mejor de los casos, el hígado metaboliza 25 gramos de alcohol a la hora, por lo que si tomamos 125 gramos de alcohol (una botella de vino), éste circulará al menos durante 5 horas por nuestra sangre.
- No hay que olvidar que el alcohol es un tóxico; una droga dura socialmente admitida.
- No permita que niños y menores de edad consuman bebidas alcohólicas.
- Hay que evitarla ingesta de bebidas alcohólicas con el estómago vacío. Cuanto más lleno esté el estómago, más tardará en el alcohol en llegar a la sangre.
- Si se bebe, que sea en pequeñas cantidades y acompañando siempre la comida. Protejamos el estómago con alimentos calóricos y grasos: embutidos, quesos o frutos secos. La grasa ralentiza la absorción del alcohol.
- Se recomienda alternar las bebidas alcohólicas con otras sin alcohol, como refrescos, zumos o agua.
- Las mujeres han de mostrar un cuidado especial: al pesar menos y disponer de menos agua en el cuerpo, el alcohol alcanza en su organismo unos mayores niveles de concentración en sangre. Además, el hígado femenino metaboliza más lentamente el alcohol.
- Ojo con las cervezas "sin alcohol"; la mayoría deberían denominarse "bajas en alcohol", ya que contienen hasta un 1 % de alcohol, frente al 4 % - 5 % de las convencionales
- Hay que ser precavidos si se está realizando algún tratamiento médico. El alcohol interactúa con algunos medicamentos, especialmente con tranquilizantes, sedantes, hipnógenos, neurolépticos... y se potencian mutuamente.
- Si va a beber, no conduzca y si va a conducir, no beba. Aún en pequeñas cantidades, el alcohol ejerce un efecto depresor sobre el sistema nervioso. Disminuye la capacidad de conducción y los reflejos y aumenta las probabilidades de un accidente.
- Consumido en exceso, el alcohol altera el sueño y produce efectos tóxicos, de los cuales la resaca es sólo un síntoma.