La reunión a tres bandas entre el comité de empresa de la planta de reciclaje de Las Calandrias, la dirección de la empresa concesionaria y el Ayuntamiento de Jerez confirmó este lunes el cambio de rumbo que ha dado el conflicto laboral tras llevar la huelga a las puerta del Consistorio el pasado viernes. Fue allí donde fueron emplazados por teléfono a una reunión con la empresa tras remitir un escrito que mostraba su predisposición a atender sus reivindicaciones.
Lo primero que ha hecho el comité de empresa tras una reunión que se prolongó poco más de dos horas es amarrar una serie de protocolos para dar prioridad a las condiciones de salubridad y seguridad del personal, tal y como explica el secretario local de CCOO, Joaquín del Valle, que estuvo presente en este encuentro. De esta manera, el martes próximo, habrá una reunión del comité de seguridad y salud para abordar las cuestiones “más urgentes”.
Entre ellas, se encuentran un plan de choque contra las plagas de ratas, habilitar mecanismos necesarios para que el suministro de agua sea de la máxima garantía y sendos protocolos de actuación para la seguridad de la maquinaria y manejo de instalaciones y para las altas temperaturas.
Una semana después, el comité de empresa y la concesionaria volverán a sentarse y así de manera progresiva para ir valorando el grado de cumplimiento de los compromisos. Con el convenio colectivo en el horizonte de 2026, también han atado la redacción del plus “penoso, peligroso y tóxico” en el documento, tras haber omitido el último término “por un error en la transcripción” del anterior convenio a 2023.
Además, este margen de “confianza” posibilitará abordar otras reivindicaciones de la plantilla relativa a las vacaciones y a los asuntos propios, cuestiones en las que el comité también quiere que se involucre el Ayuntamiento, al que también han echado en cara en los últimos días que les haya obligado a llegar hasta este extremo, tras remitirle “más de una decena de escritos” exponiendo las “graves carencias” en materia de salud, seguridad y personal que acusan los trabajadores. De hecho, el comité valora muy positivamente la huelga del pasado viernes de 24 horas al considerar que ha servido como “punto de inflexión” para que las partes se sienten, concreten y actúen.