"¿Qué gano quejándome?. ¿Me dan los puntos o los penaltis?. A veces nos favorecen. No encuentro beneficio a quejarme. Durante el partido lo puedo llegar a entender, puedo protestar decisiones al cuarto árbitro, porque el juego es el juego y hay tensión. Luego, no hay ventaja", espetó.
De todas formas, añadió que le "va bien decirlo en alto para no quedar después como uno que sólo se queja cuando le conviene". "En Cornellà no ganamos porque el Espanyol es un buen equipo y porque no hicimos bien las cosas. Si no te pitan las cosas en contra pues hay que hacerlo mejor", añadió en este sentido.