En una nota, Cepes-A ha apuntado que el tercer mes del año se cierra "como el octavo mes consecutivo en el que las cifras de parados suben y parece ir dando validez al mal augurio de que 2012 será de nuevo un mal año para el mercado de trabajo".
Lamenta que Andalucía "no se salva de la mala trayectoria marcada por los datos del resto del país y el paro sigue creciendo hasta tal punto que un tercio de los nuevos registros de personas paradas durante el mes de marzo se han producido en Andalucía".
"Se está poniendo en clara evidencia la recesión que sufre la economía y que ésta se está viendo agravada por las políticas de durísimos recortes impuestas con el objetivo de reducir el déficit", ha agregado Cepes-A.
Para esta organización "una situación como la que estamos viviendo precisa de la toma de decisiones económicas adecuadas, pues de lo contrario se corre el riesgo de depresión continuada; y hasta ahora las grandes reformas llevadas a cabo --estabilidad presupuestaria, financiera y del mercado laboral-- parecen que no están dando resultado positivo alguno, más bien todo lo contrario".
Cepes-A considera que las reformas, junto a las líneas marcadas por los presupuestos de este año, "pueden ser en algunos aspectos convenientes, pero en ningún caso están constituyendo, al menos de momento, una solución contra la recesión y el desempleo".
La economía social considera que "no se puede construir una política económica cuyo objetivo central sea la reducción del déficit, por muy respaldada que se encuentre este tipo de política por parte de determinadas instituciones europeas y financieras", y entiende que "se debe focalizar la actividad económica sobre las personas y las necesidades de éstas que en este momento pasan fundamentalmente por la creación de empleo".
"Nos encontramos ante una situación límite, que exige mucho diálogo social y, casi seguro, planteamientos económicos completamente diferentes a los que se vienen utilizando y, por cierto, cada vez más cuestionados", ha agregado Cepes-A, que considera que "la austeridad por la austeridad sin estímulos económicos públicos no parece la receta ideal, puede que ayuden a mejorar ciertos datos macroeconómicos, pero se está demostrando que no lo hacen con el mercado laboral".
