La Universidad de Jaén atraviesa una situación "límite" después de haber acabado con el "ahorro importante" que había generado gracias a su buena gestión ante la falta de financiación desde la Junta de Andalucía, que le adeuda 60,3 millones de euros. Su rector, Manuel Parras, le ha exigido un "mayor esfuerzo" para facilitar liquidez y ha advertido que "el día que no pueda pagar a los proveedores no será rector" al ser una de las "líneas rojas", junto a la defensa de la plantilla y la investigación, que no está dispuesto a pasar.
Así lo ha señalado este lunes en rueda de prensa en la que ha informado de la situación de tesorería de la institución jiennense y después de que el Gobierno autonómico se comprometió a la transferencia urgente de 25 millones de euros a las universidades de la comunidad, una cantidad "insignificante" ante la petición de 150 millones para afrontar sus necesidades básicas, dado que la deuda total reconocida es de 750 millones de euros.
En este sentido, ha asegurado que o hay un compromiso claro sobre financiación o serán "poco menos que inviables" ante un panorama "insostenible", a pesar del "ajuste de cuentas" que ya se ha realizado y del plan de priorización que se puso en marcha el año pasado, conscientes de los "recortes" que afectarían a la educación superior.
"La Universidad de Jaén tenía un ahorro importante gracias a la eficiencia, el compromiso y medidas de austeridad y ese ahorro ya no lo tenemos. Por tanto, cuanto más tarde la Junta en proporcionarnos liquidez, más difícil será atender, por ejemplo, proveedores o investigación", ha resaltado Parras, dejando de lado otras iniciativas que con esa hucha se habían podido plantear al inicio de 2011 y que ahora no son posibles.
Y es que, según ha incidido, cuentan con "tres patas fundamentales" como son el personal, los proveedores y la investigación. De hecho, el aproximadamente 1,5 millón de euros que llegarán este mes a la UJA de los 25 librados por la Junta se repartirá entre las becas Erasmus, para evitar en la medida de sus posibilidades que no se socave la movilidad internacional, y el apoyo a las personas contratadas con cargo a proyectos de investigación que no son propios, sino de otras administraciones como los Gobiernos central y regional, pero que se desarrollan en la Universidad.
PREOCUPACIÓN
De este modo, una vez que esos fondos tienen ya destino, la UJA cuenta con recursos para proveedores, con los que hasta el momento no tiene deudas, "para este mes o el mes que viene". "Más preocupación va a tener este rector porque el día que no pueda pagar a los proveedores no será rector", ha aseverado a la pregunta de la incertidumbre que puede generar esta situación entre este sector si no llega más dinero.
"Hablaré con los proveedores previamente y les diré que si no les pongo una solución en tres meses, dos meses yo no estaré. Uno tiene sus principios. No podemos pregonar que fomentamos el desarrollo territorial y lo que hacemos es arruinar. No dormiría tranquilo", ha añadido Parras, quien ha dicho esperar, en cualquier caso, "que ese día no llegue".
Para ello, ha exigido a la Administración autonómica más esfuerzos para solucionar un problema "grave" que por el momento no ha llevado a plantear movilizaciones en el seno de las universidades, sino a mantener esa "postura institucional" mientras se está negociando con la vista puesta, entre otras cosas, en lo que ocurre con los presupuestos y con el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) al que probablemente acuda la Junta.
Junto a ello, el rector ha invitado a "ser pragmáticos", de manera que una vez conocido que los gobernantes "no están apostando" por la educación superior, se analice qué se puede hacer "con las mimbres" de las que se dispone. "He dicho líneas rojas: plantilla y proveedores y todo lo que podamos ahorrar lo vamos a destinar a investigación", ha reiterado no sin lamentar el "fracaso como país" que supone formar talento y ser "incapaces de sentar las bases para retener ese talento".