La alcaldesa de Puerto Real, Maribel Peinado (PA), considera que un posible desmantelamiento de la planta de Navantia en la localidad gaditaba provocaría "un cisma en la ciudad", ya que además de los empleos directos la industria auxiliar sufriría un "varapalo".
Maribel Peinado, en un comunicado, asegura que mantiene la confianza en las palabras que recientemente le transmitió el director de los astilleros de San Fernando y Puerto Real, Pablo López, en su reciente visita a la alcaldía puertorrealeña.
En aquella reunión, según ha recordado, el director expresó la intención de Navantia de trabajar por el mantenimiento de la planta y la búsqueda de carga de trabajo. "En ningún momento aludió o dejó entrever la puesta en marcha de un plan de movilidad que afectara a los trabajadores de Puerto Real. Desde el Ayuntamiento consideramos que el desmantelamiento de la factoría provocaría un cisma en la ciudad ya que además de los 600 empleos directos quedarían afectadas las empresas auxiliares y se eliminaría un flujo económico fundamental para la sostenibilidad social de Puerto Real", asegura la alcaldesa.
La primera edil espera que la intención de la dirección de Navantia sea la que a ella le transmitió su presidente y que no era otra que la apuesta por la planta puertorrealeña. "La deslocalización de los trabajadores y el posible desmantelamiento del astilleros es algo impensable y ante lo que siempre encontrarán el rechazo del Ayuntamiento de Puerto Real", comenta la alcaldesa, que añade que "los astilleros de Puerto Real son competitivos y de garantía. Trasladaré a la empresa nuestro más enérgico rechazo a todo aquello que nos encamine a la pérdida de efectivos personales en la factoría", subraya.
El Ayuntamiento de Puerto Real espera y desea que la sospecha de los trabajadores acerca del posible negocio que pueda realizar la empresa con el suelo sea "infundado" y que la dirección empresarial aclare "cuanto antes" el asunto "para no contribuir a enrarecer un ambiente ya conflictivo".