La rapidez policial salva la vida de una menor de dos años en Cádiz

Sobre las 20 horas de ayer y con ocasión de prestar  servicio a pie cubriendo la procesión de la Hermandad de Columna en la calle San Francisco a la altura de la calle Sánchez Barcaiztegui, dos agentes fueron requeridos por numerosas personas que les alertaron de la existencia en zona cercana de una menor de 2 años de edad que estaba sufriendo convulsiones y cuya madre presentaba fuerte crisis nerviosa.

            Con la debida urgencia comienzan a atender a la menor, comprobando a su llegada como la misma no respondía y al parecer carecía de pulso, por lo que solicitaron a la Central ambulancia del 061. A pesar de contar con la colaboración de una enfermera fuera de servicio que se encontraba por la zona, y como quiera que transcurrían los minutos y no se terminaba de confirmar el envío del servicio médico (061 se encontraba en su base del Hospital), los agentes (que no disponían de patrullero en esos momentos) deciden coger en brazos a la menor y salir corriendo para parar a un vehículo que circulaba por la Avenida del Puerto y acudir de forma urgente al Hospital Puerta del Mar, ya que llegaron a temer por la vida de la niña.

Efectivamente, en el interior del turismo se introdujo uno de los agentes con la menor en brazos, informando su compañero al oficial de guardia de la decisión tomada. Ya a la altura de Plaza Sevilla otros agentes de la Policía Local se unieron a la intervención (dos motoristas y dos oficiales en vehículo que acudieron de refuerzo para abrirles paso hasta el Puerta del Mar.
          
            La menor logró finalmente entrar con vida en Urgencias de Pediatría y recuperar la consciencia, quedando a las 22 horas estabilizada y fuera de peligro, aunque quedó ingresada en observación. Asimismo, el personal sanitario apuntó a los agentes que la rapidez en el traslado fue fundamental para atender a la pequeña, ya que de ello depende minimizar las posibles secuelas cerebrales.

            La decisión de los dos agentes de la policía local fue determinante, por haber controlado la situación en el lugar -con unos padres superados por los acontecimientos y elevada concentración de público que esperaba la procesión- , y por actuar con decisión y acertar con no esperar a los servicios sanitarios.

            Por último, desde la Policía Local también se ha querido agradecer la labor del conductor que colaboró en el traslado, que por la gravedad y la rapidez que requería la situación no pudieron anotar su matrícula. El conductor llevaba un turismo de la marca Volvo.