El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha afirmado que el Gobierno vasco no llamará a secundar la manifestación convocada para el próximo 11 de enero en Bilbao en favor de los presos de ETA y se ha dirigido a la izquierda abertzale para decirle que no puede exigir "sensibilidad" con los presos cuando ella "no es sensible" a actos de kale borroka, pintadas o insultos.
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Urkullu ha afirmado que el Ejecutivo no emplazará a adherirse a la marcha, en coherencia con el proceder que él "históricamente" ha mantenido, "aún cuando, en el pasado", siendo dirigente del PNV, la formación jeltzale ha participado "en algunas concentraciones".
"Pero ni es posible que vivamos en la exigencia de la sensibilidad a los demás, cuando uno mismo no quiere ser sensible a los sentimientos de los demás", ha apuntado en alusión a la izquierda abertzale.
En este sentido, le ha reprochado que no sea "sensible ante lo que puedan ser pintadas, actos de la llamada violencia callejera, actos de protesta o insultos. Tenemos que intentar sentar las bases de lo que pueda ser una convivencia y, luego, ver si podemos hacer un camino juntos", ha añadido.