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Cómo vestirse de gitana y no morir en el intento

El Real, escaparate de la moda flamenca. Pese a las altas temperaturas, cada año se ven más mangas largas en el González Hontoria

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  • Un grupo de flamencas. -

La Feria no se concibe sin calor, pero los casi 40 grados a la sombra que se registraron el pasado lunes en el Real convierten a las mujeres que se visten de flamencas estos días en auténticas heroínas. Algunas, las más jartibles, ya han lucido modelo en el González Hontoria, pero la mayoría lo hará desde hoy miércoles, Día de la Mujer. Todo un escaparate también para ver  las tendencias en moda flamenca de esta temporada. Generosa donde las haya, en la ‘pasarela’ de la Feria del Caballo vamos a ver de todo: desde el traje de tiranta, las dos piezas -mucho más en extinción- y el vestido de manga larga, este último el preferido por las flamencas en los últimos años y que más están explotando los diseñadores. Y, por favor, si alguien obra en su poder con un vestido de gitana ‘a lo Marisol’, mejor que se lo regale a la sobrina o su vecina pequeña.


Aunque el modelo tradicional, esto es, escote en forma de uve o redondo por delante y detrás, según se prefiera, es un clásico, la moda flamenca también evoluciona, y jugar con ellos y con la manga cada año, además de combinar los tejidos, cada vez gana más adeptas. El resultado es lo que vamos a ir viendo estos días: mangas de gasa o popelín por debajo del codo, con o sin volantes, a gusto de las flamencas y hasta escotes de barco, e incluso a la caja, sinónimo de elegancia pero también de mucho calor.


Lo de sugerir por la espalda también se hace extensible a  este campo, y cada vez se ven más flamencas que apuestan  por darle la fuerza al vestido por detrás, resaltando una parte muy sensual de la mujer como puede ser la espalda con un escote que se abrocha al cuello, otra de las tendencias. Los flecos continúan otro año más, pero el mantoncillo de toda la vida le gana esta Feria la batalla. Un clásico que también se presenta renovado como complemento estrella que es. Nada de pegárnoslo al cuello, ni a la cintura. Eso está prohibido y, atención,  procurad también no tapar el escote del vestido.

Arriesgar o morir
El peinado también admite tantas opciones como aquellas con las que las mujeres se sientan más a gusto: desde la tradicional rosa arriba, a la de al lado, para las más clásicas, algo más en desuso, mientras que lo que más se ha visto este año en las pasarelas ha sido las diademas de flores o ramilletes de rosas u hortensias. ¿Te atreves? Ya el año pasado las más arriesgadas lo hicieron, y para estos días se espera que muchas flamencas apuesten por un estilo favorecedor y práctico a la vez. Renovarse o morir. Esa es la cuestión. O tirar del traje de siempre y customizarlo un poco, que estamos en crisis.

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