El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, se ha mostrado hoy dispuesto a dar a conocer los nombres de los grandes defraudadores de impuestos, pero ha dejado claro que eso lo definen los tribunales, no un procedimiento administrativo.
Montoro se ha pronunciado así en el pleno del Congreso en respuesta al diputado socialista Joan Rangel, quien le ha preguntado si en la reforma de la Ley General Tributaria se va a incluir la posibilidad de hacer públicos los nombres de los grandes defraudadores aunque se hayan acogido a la amnistía fiscal.
El ministro ha recalcado que esa calificación la dan los tribunales, no la administración, pero se ha mostrado dispuesto a dar "la mayor difusión" a las sentencias y consecuencias del fraude fiscal "promoviendo la ejemplaridad" en el pago de los impuestos
A su juicio, lo relevante es que las cifras procedentes de la lucha contra el fraude fiscal son "históricas" y que nunca se ha vivido "una época de afloramiento de casos de fraude fiscal tan numerosa y llamativa" como la que se está viviendo ahora en España.
Rangel ha reclamado al ministro que se den a conocer los nombres de los 30.000 defraudadores que se beneficiaron de la amnistía fiscal de 2012 y que se investigue el origen de los fondos.
Eso es lo que demanda la ciudadanía, ha dicho el diputado socialista, quien ha insistido en que los ciudadanos piden "la verdad, datos fiables, no chascarrillos de café".
Y ha prometido que los socialistas van a ser "beligerantes, caiga quien caiga", en todos los casos, sobre todo cuando el fraude vaya ligado a la corrupción política.
El parlamentario, no obstante, ha reprochado a Montoro su comportamiento durante su comparecencia para hablar del presunto fraude fiscal del expresident de la Generalitat Jordi Pujol y le ha recordado que "los corruptos son las personas, no las ideas".