El Ayuntamiento de Ronda ha comprado una grúa para prestar de este modo con un vehículo de propiedad municipal el servicio de retirada, tras que el pasado año éste se decidiera gestionar de manera directa. Entonces, en julio de 2013, el Consistorio informó del alquiler de un vehículo y su correspondiente conductor por 70.000 euros anuales; el acuerdo se cerró con Grúas El Pino, por un año, y tras haber pasado ese tiempo y no alcanzarse ningún acuerdo con esta empresa rondeña para renovar el alquiler, Tráfico ha decidido comprar un vehículo que pasará a ser propiedad municipal “y ahorrará costes al Ayuntamiento, en cuanto quede amortizada la compra”, declaró a RONDA SEMANAL el responsable municipal de este departamento, Antonio Arenas.
Aunque no ha trascendido el precio del vehículo, por estar aún ultimando el Consistorio la compra, Arenas precisó que tras consultar con especialistas al respecto, se ha optado por adquirir una grúa de segunda mano “a muy buen precio”.
Tráfico estudia ahora si será un empleado municipal que ya esté en plantilla quien, mediante la amortización de alguno de los puestos de trabajo, pueda conducir esa grúa, para lo que “deberemos estudiar si alguno de los perfiles es el adecuado” a ese puesto. De no ser así, el Ayuntamiento establecerá un perfil y realizará una oferta pública de empleo para dicha plaza. Nada hay concretado aún.
Fue en 2013 cuando el Consistorio, tras una enorme polémica, se quedó con la gestión del servicio de grúa municipal, todo tras que la empresa que desde 2008 prestó el servicio, Setex Aparki, renunciara al mismo una vez culminado el período establecido entre ambas partes y “ante la falta de ingresos”. Tal situación se dio después de meses de desencuentros entre el entonces nuevo Gobierno de populares y andalucistas en Ronda y dicha empresa, con denuncias por parte de los empleados de tejemanejes para que la empresa se viera obligada a abandonar la concesión. Llegaron de hecho a interponerse distintas demandas por parte de los antiguos empleados.
En 2013 el Ayuntamiento explicó que la grúa retira una media de tres vehículos al día de la calle, unos 70 al mes, lo que permitía recaudar unos 90.000 euros por sanciones. De no haber cambiado ese volumen de multas, el Consistorio amortizaría rápidamente el nuevo vehículo grúa.
