El Comité de Empresa de Ercros en Palos de la Frontera (Huelva) ha asegurado que la venta de la factoría es "un castigo" a Andalucía y le ha pedido a la Junta de Andalucía que no autorice a la matriz la venta de las salinas.
En un comunicado, el comité ha expresado "su total desacuerdo" con la dirección de Ercros en su decisión de desinvertir en el centro de Palos al tratarse de una determinación "arbitraria" que "nada tiene que ver con criterios económicos, como demuestra el hecho de que hay una planta en Tarragona que acumula más pérdidas y, sin embargo, es mantenida por su condición de estar instalada en Cataluña, comunidad de donde es originario el grupo propietario".
Asimismo, han recordado que desde 2009, fecha en la que la dirección de Ercros "intentó cerrar el centro por las mismas razones", en Palos "hemos tenido que soportar el despido de más de la mitad de la plantilla, el cese de muchas de nuestras actividades, y el traspaso de parte de nuestra producción a otros centros situados en otras comunidades autónomas para hacerlos más rentables, en detrimento de nuestros resultados".
"Incluso así, no han podido doblegar el esfuerzo de la plantilla de este centro, y no lo harán", han proseguido desde el comité, antes de apuntar que en recientes fechas, se pudieron comprobar gracias a "unas filtraciones aparecidas en medios de comunicación cuáles eran realmente los negocios deficitarios del grupo Ercros, al incluirse entre esos documentos una auditoría económica interna del grupo; grandes pérdidas localizadas en otros centros sobre las que ningún miembro de la empresa se atreve a hablar, aunque ya sean de dominio público, y menos proponer su venta o cierre, muy al contrario, se sigue invirtiendo en ellos".
"La especulación y los despidos los tenemos que pagar el resto de centros. Palos la conforman dos unidades productivas, el centro mismo de fabricación de cloro, y las Salinas, sobre las cuales Ercros no dispone de ningún derecho legal al haber caducado las concesiones administrativas que las rigen", enfatizan.
Además, han señalado que en el centro de Palos producen cloro mediante celdas de cátodo de mercurio, el uso del cual estará prohibido a partir de diciembre de 2017 por su alta toxicidad (Directiva Europea 2010/75/UE), "de ahí que se necesite una inversión para cambiar esa tecnología por celdas de membranas, libres de este elemento".
Añaden que el proyecto de reconversión, según las mismas estimaciones del grupo Ercros, costaría unos 14 millones de euros, y necesitaría de un plazo de ejecución de 24 meses, por lo que se debería comenzar, a más tardar, en "enero de 2016".
El comité de empresa teme que esto sea "una venta encubierta" de las salinas, sobre las que hay una resolución de la Junta de Andalucía para salir a concurso público, y que de esta forma podrían conseguir por otras vías, para finalmente cerrar el centro, "despedir a toda la plantilla, y explotar las Salinas únicamente".
A juicio del comité, "también se podría estar tratando de eludir las responsabilidades de la alta contaminación de mercurio producida en esos terrenos después de 40 años de actividad".
Por todo ello, desde el comité de empresa han pedido a la Junta de Andalucía que no otorgue ningún tipo de concesión administrativa o prórroga sobre esas salinas mientras "no garanticen por escrito su compromiso de futuro con el centro de Palos y su plantilla mediante la reconversión a tecnología de membranas".