La satisfacción del deber cumplido tras el triunfo ante el filial del Decano era palpable en la zona mixta del Barbadillo, donde el entrenador local, Keko Rosano, atendía a los medios después de un partido no demasiado difícil para el Arcos, en el que había que acertar con la portería contraria para lograr unos preciados puntos con vistas a salvar la categoría.
“El acierto individual de nuestros jugadores ha sido poco porque si no se hubieran llevado una goleada de escándalo, pero sí es verdad que hoy había que ganar como fuera y era un paso importantísimo para salvar la categoría casi totalmente: nos quedamos a seis puntos del descenso, le ganamos el goal-average a otro de los equipos de abajo y llegamos a una situación muy cómoda para afrontar lo que queda de campeonato”. El once inicial arcense fue el mismo que el de hace siete días en Las Cabezas, incluso el mismo banquillo. Además, la jugada que abre el marcador para el equipo local es calcada a la que protagonizaron Parada y Forján frente al Cabecense, pero allí no entró la pelota en el marco sevillano. La estrategia fue un arma letal a favor del Arcos te el Recre, dos de los tres goles se marcaron de falta. “Cuando las cosas van bien no tienes por qué cambiar pero si encima no tienes más, pues no puedes hacerlo ya que tenemos solamente 16 jugadores, aunque el banquillo ha mejorado bastante, de hecho, el partido lo hemos ganado en la segunda parte con los dos cambios: Juan Carlos y Heredia le han dado más frescura al equipo y es lo que nos ha dado la victoria.
En la primera mitad estábamos pesados e imprecisos y nos costaba. De hecho, nos hemos ido 0-0 al vestuario. Yo creo que el equipo está haciendo un final de campaña muy bueno, llevamos cinco partidos sin perder (dos victorias y tres empates) y eso, para acabar una temporada, es fundamental”. Llamó la atención la posición de Parada como interior izquierdo, cerca de la defensa contraria para presionar en la salida de balón del rival. “Bueno, es un invento mío para meter dos delanteros (José Carlos y Forján) y tres medios-centro (Guerrero, Zúñiga y Parada). Si quiero tener tres pivotes tengo que meter a Parada en la izquierda y a Zúñiga en la derecha, más retrasado que de costumbre. Al perder al banda izquierda ubico a Forján y cuando este se va arriba con José Carlos, es Parada el que ocupa esa zona izquierda. Es un movimiento táctico que estamos trabajando y que nos está saliendo bien, tanto en Las Cabezas como aquí, y es muy importante el concurso de todos los jugadores.
El grupo está muy animado para acabar el campeonato y en una liga normal faltando siete jornadas, ya estaría a salvo ya que el año pasado se salvó con 42 puntos, pero esta temporada es una liga más larga y hay que apretar un poco más. Creo que ganando dos partidos más podemos decir que estaríamos salvados, si no de forma matemática, sí virtual”. Las carencias del rival en efectivos hacían pensar que se podía haber planteado una reclamación si el resultado no hubiese sido favorable ya que solo tenían seis jugadores del primer equipo y uno lesionado, el resto eran juveniles. “Bueno, no creo que hubiésemos llegado a esos extremos, ellos son amigos míos y excompañeros, yo he jugado en el Recreativo y no se trata de hacerle daño a ningún club si sacamos adelante el partido.
Ellos venían a los justo, con muchos juveniles, como lo han venido haciendo en partidos anteriores, por eso Los Barrios les ganó 4-0 y el Alcalá 0-2 y ahora nosotros 3-0, porque están muy justos de jugadores”. Había que reseñar la acción de Pablo ante el delantero Álex en el minuto 65 cuando el marcador señalaba 1-0. “Pablo nos está dando estabilidad, es un portero veterano que empezó con dudas por su estatura pero está muy seguro últimamente, muy entero. Sus 34 años le están sirviendo para garantizarnos seguridad en la portería, pero también quiero salvar al equipo pronto para que Mateo, que ha hecho una temporada estupenda en su debut en Tercera División, lo refrende con algunos partidos más”. Otro de los destacados en el bando local fue el lateral Adri, que lo está haciendo muy bien en las últimas jornadas. “Adri es un fenómeno, tiene 23 años, es muy educado, muy profesional y entrena como el que más, lo ha jugado todo y no se ha perdido un solo partido desde que llegó. Juega los 90 minutos, lleva tres goles y es incansable tanto en defensa como en ataque. No es un descubrimiento porque yo ya lo había tenido en el Puerto Real -por eso me lo traje-, pero sí es una de las sorpresas positivas de la Tercera esta temporada”.