El vecino de la localidad cordobesa de Fuente Palmera afectado por la vaquería declarada ilegal por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), desde julio de 2009, y a la espera de su cierre definitivo o traslado a otra zona del pueblo, que ya estaba aprobado desde 2012, prevé denunciar en próximos días a distintos responsables del Ayuntamiento y de la Junta de Andalucía ante "el incumplimiento" del cierre.
Así lo ha manifestado el propio afectado, Francisco Adame, quien ha apuntado que prevé interponer denuncias ante la Fiscalía por la supuesta comisión de delitos de prevaricación, como consecuencia de las actuaciones, en lo que respecta a sus competencias, al "no estar dentro de la normativa para el cumplimiento" de la retirada de las instalaciones.
Además, ha indicado que pedirá indemnizaciones por daños ambientales, que oscilarán entre "los 98.000 y 500.000 euros", todo ello teniendo en cuenta que "el procedimiento administrativo", tras las peticiones de cierre al Consistorio y al Gobierno regional, concluye el próximo día 21 de octubre.
En concreto, ha recordado que el día 30 de junio hizo la solicitud al Ayuntamiento colono, mientras que a las tres delegaciones de la Junta de Andalucía en Córdoba, las de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, la de Salud y la de Agricultura, se dirigió el día 21 de julio, por lo que "el plazo para contestar acaba el día 20 de octubre", según advierte.
Al respecto, Adame ha subrayado que "la única respuesta" que espera es "el cierre de la vaquería", aunque asegura que "las denuncias seguirán adelante", principalmente las peticiones de indemnizaciones, después de llevar en su "lucha" desde el año 1992.
Entretanto, el afectado ha declarado que "lo que hace falta es voluntad política para llevar a cabo la medida de cierre", para que su familia pueda tener "una vida digna como cualquier ciudadano".
ENCIERROS
En su protesta por "el incumplimiento" del vaquero y la administración de la sentencia del TSJA de 2009, Adame se ha manifestado ante las puertas de la Fiscalía cordobesa y se ha encerrado en el Consistorio de Fuente Palmera en varias ocasiones, además de realizar otros actos.
Desde el verano de 1992, relata que tiene que soportar junto a su familia "los daños y perjuicios que suponen tener una explotación ganadera ilegal" junto a su vivienda, situación que "ha sido tolerada por el Ayuntamiento", convirtiéndose de ese modo, a su juicio, en "corresponsable".