Los riesgos para la salud humana y el medio ambiente son los motivos que han llevado tanto al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente como al de Sanidad ha desautorizar la fumigación aérea contra la procesionaria en Hinojos.
El subdelegado del Gobierno en Huelva, Enrique Pérez Viguera, en un comunicado, ha precisado que esos son los motivos de la negativa de ambos ministerios.
Se trata de una medida que reclama el alcalde, el socialista Ángel Curiel, al entender que es la única solución para afrontar una situación que se está convirtiendo en un problema de salud pública, como ha trasladado a ambos ministerios.
Pérez Viguera se ha referido al Real Decreto 1311/2012, que establece el marco de actuación para conseguir un uso sostenible de los productos fitosanitarios, y que prohíbe expresamente el tratamiento aéreo con productos fitosanitarios por el impacto que puede tener dicha práctica de pulverización sobre la salud humana y el medio ambiente, al tiempo que marca las posibles excepciones.
"Hay que recordar que la Unión Europea tiene prohibido específicamente el uso del fitosanitario con el que se pretende fumigar en Hinojos por su impacto en la salud y el medio ambiente", ha apuntado Pérez Viguera, quien ha recordado que la zona afectada pertenece a la comarca del Parque Nacional de Doñana y es un área de cultivo agrícola.
También se ha referido a la petición realizada ayer por alcaldes de distintos municipios de esta comarca, también afectados por la procesionaria -Almonte, Hinojos y Lucena (Huelva) y Villamanrique y Aznalcárzar (Sevilla)- de que el asunto se trate como "un problema sanitario y no forestal".
En este sentido ha apuntado que el mismo RD establece que la competencia para declarar una emergencia sanitaria es de la comunidad autónoma, "y hasta el momento esta excepcionalidad no se ha declarado por la Junta de Andalucía".
