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Arcos

“Lo que se hace es ir sembrando y dando fuerza a la devoción”

Este sábado 16 de abril, a las 21.00 horas, el arcense José Carlos Navas Collantes pronunciará en la parroquia de San Francisco la vigésimo cuarta edición del Pregón de la hermandad del Rocío

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  • José Carlos Navas. -

Desde luego, ‘tablas’ no le faltan... Basta leer esta amplia entrevista para percibir nítidamente que José Carlos sabe lo que se trae entre manos.


Bueno, ya sólo le faltaba a José Carlos Navas pregonar a nuestra Madre del Rocío… ?
—Como arcense, me siento orgulloso de que Arcos tenga una hermandad filial de la Santísima Virgen del Rocío. Una hermandad que nació con fuerza hace más de dos décadas desde el corazón de un amplio grupo de hombres y mujeres rocieros. Personas que lucharon e hicieron realidad este proyecto de fe. En la hermandad hay gente a la que aprecio y quiero desde pequeño. Desde que me instalé en Sevilla, allá por 2001, comencé a ir con amigos al Rocío, vivir la experiencia de compartir días con personas que no son de tu familia, pero hermanados en la Blanca Paloma. Se construyen lazos que quedan y permanecen en el tiempo. Encontré el sentido de estar en la aldea almonteña incluso en fechas en las que no se celebran actos y cultos por la hermandad matriz. Momentos para la reflexión, apartarme de lo cotidiano, de los agobios y de la rutina, que a veces acaba con la capacidad de sorpresa y de alegría. Descubrí el entorno idóneo para encontrar buenas energías, escribir, no mirar el reloj y donde la oración ha sido muy reconfortante. También el contraste de colores, de alegría y cantes propios de nuestra tierra hacen de la romería y de cualquier reunión de buenos amigos una experiencia preciosa y siempre distinta. Ninguna romería es igual. Siempre diferente, pero siempre con el espíritu de la fiesta, de la gloría, que es lo que nos inspira Nuestra Señora. Es complicado imaginarse lejos de la madrugada de Pentecostés sin estar al lado de la Madre de Dios, siempre estaré para acompañarla durante su procesión hasta que el cuerpo me lo permita. La oportunidad de pregonar las glorias y alabanzas de la Santísima  en la hermandad de Arcos surge en agosto de    2015, en torno a las fiestas Patronales en honor de Nuestra Señora de las Nieves. Durante esos días gestionaban el ambigú de la velada flamenca en la plaza del Cabildo los rocieros de Arcos. La hermana mayor, Nieves Macías Reyes, a la que me une una buena amistad, me dijo: “Tengo que hablar contigo una cosita”.  Aunque era  pronto, iba a proponerme a su junta de Gobierno para el XXIV Pregón en 2016. En septiembre de 2015, por unanimidad del cabildo de oficiales se firma la designación y el día 27 de febrero de 2016,  en la Parroquia de San Francisco, al final de la Sabatina mensual me entregan la carta y el pañuelo que la Virgen del Rocío de Arcos ha llevado debajo del sombrero y amapolas: un regalo que guardo con mucho cariño y que el día del pregón llevaré en el bolsillo de la chaqueta siguiendo la tradición de esta hermandad arcense con sus pregoneros.

Háblanos de tu experiencia con los rocieros de Arcos…
—Tengo momentos muy bonitos con los rocieros de Arcos grabados en la memoria. Recuerdo cuando hicieron la obra del camarín de la Virgen y del Simpecado en la Parroquia de San Francisco. Era pequeño, como veía la puerta abierta y vivía prácticamente en frente, iba a mirar que hacían y a preguntar para qué era. ¡Para una nueva imagen de la Virgen! Los hermanos ayudaban y entre todos hicieron el sueño realidad. Entre ellos recuerdo a Paquita, Pepe Gallardo, “El Marisma”, Luis Romero, Joaquina León, Cayetano y su familia, Salvador Albertos, Faustino de la Villa, Loli, Paco ‘Lebrón’… Fueron especiales los sábados por la mañana en los que me llamaba Luisa Redondo para ayudar a preparar el camarín de la Virgen. Luego durante mis años en Arcos, siempre he ido a la misa de romeros y acompañado a la carreta hasta despedirla de la ciudad, incluso estando fuera por estudios o trabajo también he intentado venir, es una mañana muy alegre y bonita la que se vive en Arcos. Desde hace más de diez años no falto en la puerta del santuario en la aldea para ver la carreta de nuestro pueblo postrarse a las plantas de la Blanca Paloma. A los integrantes de la hermandad les conozco, todos son antiguos alumno de La Salle, o de la Parroquia, de otras hermandades o del camino de la Juventud. Antes el camino de la Juventud se hacía en verano y me animé a ir. Una experiencia muy recomendable para los jóvenes de Arcos, sin televisión, sin conexión a Internet…, sólo con las personas con las que vas caminando; montas la acampada para descansar y, al toque de diana, recogida del campamento para reanudar el camino hacia la Virgen del Rocío. No faltaron el rezo del rosario, las sevillanas, la comida compartida, el baile y conversaciones que hacen conocer realmente a las personas. Volví de ese camino joven bautizado como “Temple de Palacio” (ja, ja, ja, ja…). Hubo un momento en que no podía más! Con la hermana mayor tengo una buena amistad; nos hemos visto más veces en la aldea que en el propio Arcos. Coincidimos en verano de 2014 en una fiesta benéfica organizada por el cantante Manuel Lombo y me acerqué a ella y la saludé… Realmente fue donde la conocí, y sus palabras, sencillez y naturalidad hicieron que la tuviese en cuenta para solicitar la casa hermandad y ensayar ahí el pregón que en 2015 pronuncié para la hermandad de Albacete o invitarle ese año a los actos que tuvimos en representación de la hermandad de Arcos. Le estoy muy agradecido.

Pregonar la Semana Santa y a una hermandad de gloria son dos cosas bien distintas, pero en el fondo, ¿no crees?, no dejan de ser una proclamación de fe…
—Evidentemente el contenido es diferente. El pregón de Semana Santa es el anuncio de la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor. El pregón del Rocío es el anuncio de la venida del Espíritu Santo, según la tradición, en forma de Blanca Paloma. El texto es de alegría, propio de un pregón de gloria.

¿Nos puedes adelantar algo sobre el pregón de este sábado?
—El pregón está estructurado en tres partes. La oración y el compromiso del rociero, camino y presentación de la hermandad y camino de vuelta-despedida de la romería. No es un pregón cronológico. Resaltaré las raíces de la devoción mariana en Arcos hasta llegar a la Reina de las Marismas. Anunciaré los acontecimientos que para mí son más importantes y los que vivo con intensidad. Para pregonar algo, antes hay que vivirlo y sentirlo. No dejaré atrás el momento social en el que estamos viviendo, el de las injusticias, las regresiones o los grandes males que afectan a la ciudadanía. Intento resaltar lo tradicional pero siendo consciente del siglo en el que estamos. El pregón va a estar animado musicalmente por el Coro de la Hermandad de San Antonio y por Juan Jesus Ortega Morales del grupo Clavelé. Ha sido un regalo precioso contar con esta personas para realzar desde la música las palabras dedicadas a la Virgen del Rocío. Aprovecho para invitar a todas las personas a participar en el pregón, especialmente a la juventud cofrade de las hermandades y asociaciones que son el futuro.

¿Qué opinas sobre el momento que vive la corporación rociera arcense?
—La hermandad del Rocío de Arcos es joven aún, pero fuerte, porque nació del corazón de personas de una profunda fe y entregaron sus vidas a la causa. El año que viene creo que cumple el veinte aniversario como hermandad filial de la matriz de Almonte. Todo lo que se hizo y se realiza en la actualidad es ir sembrando y dando fuerza a la devoción hacia la Madre de Dios bajo la advocación del Rocío. Eso es un regalo enorme y debe ser motivo de orgullo para los arcenses. La actual junta de Gobierno tiene muchos retos y mucho trabajo por hacer, pero estoy seguro que no les falta ilusión y que su deseo es seguir llevando a la corporación a lo más alto. La aceptación social siempre podría ser mayor, pero empezando por los arcenses. Cuando una hermandad va rodeada de su pueblo a la aldea se palpa y se siente la unión. Deberíamos apoyar más a la hermanad y sentir que en un entorno internacional, Arcos está representado dentro de la devoción hacia la Virgen del Rocío. Las comparaciones son odiosas, no me gustan.

En el terreno personal, ¿qué proyectos manejas ahora mismo?
—Después de más de doce años en Sevilla, donde desarrollé proyectos para la Junta de Andalucía en zonas con necesidades de transformación social, volví a Cádiz y Arcos durante seis meses para poner en marcha por primera vez en la zona un proyecto de formación para la capacitación profesional e incentivar las prácticas en empresas, impulsando la inserción laboral. Volví a Sevilla en 2016 como coordinador de Voluntariado y responsable de Desarrollo Solidario de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. Recientemente, desde marzo resido en Extremadura, desarrollando en Mérida y Badajoz proyectos europeos de garantía juvenil y empleo. Tengo la suerte de llevar a cabo el trabajo desde mi vocación. Sigo comprometido en problemas de la sociedad, como el desempleo y la falta de formación en los jóvenes, las adicciones y la violencia de género. Aprovecho para agradecer a mis queridas amigas y hermanas de vida, Carmen Lanagrán Haro y a Cristina del Valle (cantante, defensora de los derechos humanos y activista) que estén a mi lado, porque han sido mis verdaderas maestras en la lucha por la igualdad de oportunidades, la lucha contra la violencia de género y el compromiso de palabra, obra y acción.

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