En su pueblo y arropado de manera masiva por su gente. El cantaor Juan Francisco Rodríguez, Cañejo de Barbate, presentó la noche del pasado martes su primer disco en solitario, ‘La luz que me guía’, en un concierto con un éxito rotundo de público, al que el artista respondió con gran derroche de arte sobre el escenario del Paseo Marítimo de Barbate.
“Ha sido muy grande. No tengo palabras para agradecer esta acogida de mi pueblo”, señaló Ca-ñejo al finalizar su actuación. “Tenía que presentar mi disco en Barbate, para mi gente… Y la respuesta no ha podido ser mejor. Ha sido una noche inolvidable”, expresó emocionado.
El cantaor dio a conocer junto a una banda formada por excelentes músicos, las canciones que forman parte de su nuevo trabajo. Entre ellas, Cañejo entonó alegrías de Cádiz, bulerías o rock andaluz, entre otros muchos estilos que están presentes en este álbum. Resaltar que este disco combina toda la esencia de los dos trabajos de Cañejo: la música y la pesca de atunes en la al-madraba de Barbate.
Además, el público también pudo disfrutar del estreno del videoclip del tema ’Mi faro marinero’, dirigido por el cineasta barbateño David Acereto, ya disponible en los canales de Youtube, Fa-cebook y Vimeo.
Para hacer de la noche una velada mágica, el artista gaditano se rodeó de las guitarras de Adriano Lozano y ‘Titi de Conil; la percusión de David Gavira; el bajo de Yoni de Madrid; el piano de Tomy Alemania; el violín de Emilio Martín; la batería de Pedro Escámez; las voces de las coristas Ana Gamaza y Mirian Carrasco; y los palmeros Jorge Bautista y Kiko Fajardo.
Un gran aporte cultural a Barbate
El concierto, celebrado en colaboración con el Restaurante La Traiña y el Ayuntamiento de Bar-bate, fue presentado por la locutora Macu Tomé y contó con la presencia en el escenario del alcalde de la localidad, Miguel Molina, y el concejal de Fiestas, Juan Miguel Muñoz, quienes agra-decieron al cantante barbateño su aporte cultural al municipio.
El evento concluyó con Cañejo entonando ‘Tú eres la voz’, un rock andaluz que puso a bailar a todo el Paseo Marítimo en una noche flamenca con un inconfundible sabor marinero.