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El viento comienza a remitir, aunque deja un segundo herido

La Agencia Estatal de Meteorología tiene vigente hasta la medianoche, avisos amarillos por viento con rachas máximas de 80 kilómetros

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  • El Colegio de La Unión reanudará sus clases el próximo lunes tras cerrar al desprenderse una claraboya

Lo peor del temporal de viento de los dos últimos días ya ha pasado, al menos en Jerez, a juzgar por las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para hoy, para la que, no obstante, tiene vigente hasta la medianoche, avisos amarillos por viento con rachas máximas de 80 kilómetros por hora en la Campiña, Grazalema y el Litoral, mientras que en el Estrecho se esperan intervalos de 90 kilómetros por hora. El servicio meteorológico también mantiene activo el aviso naranja por fenómenos costeros en la provincia gaditana hasta las 00,00 horas del sábado.. Atrás quedan dos jornadas que han puesto a  prueba el operativo de seguridad dispuesto con picos realmente complicados en la jornada del miércoles y de una noche del jueves que se hizo eterna y que  mantuvo en vela a muchos vecinos.

"Ha sido una noche horrible. Ha sido una situación que no se había dado nunca en Jerez", apunta la alcaldesa, que asegura que ahora hay que cuantificar daños

La  propia alcaldesa, Mamen Sánchez, la llegó a calificar este jueves de “horrible” cuando dio cuenta del balance de incidencias registradas. De esta manera, aunque el viento, según la Aemet, aún perdurará hasta primeras horas de la mañana de este viernes y se prolongará hasta el sábado en zonas del litoral, en el caso de Jerez no lo hará ni por asomo con la intensidad -de más de 80 kilómetros por hora-  con la que se ha llevado por delante árboles, muros, superficies metálicas, y hasta banquillos, obligando a suspender las clases en el CEIP La Unión tras el desprendimiento de una claraboya. 

Afortunadamente, el balance en cuanto a daños personales hasta el cierre de esta edición ha sido de dos heridos leves, pues a la conductora que resultó herida tras caer una rama de un árbol sobre su vehículo en la Ronda de los  Alunados, se sumó ayer el de un varón sobre el que se precipitó parte de una cristalera en un área de servicio de la carretera A-381 (Jerez-Los Barrios).


Más cuantioso son los desperfectos materiales de un viento de Levante que se ha cebado con la ciudad más que nunca y están pendientes de cuantificarse, arrasando con naves en construcción,  muros de viviendas y farolas.  “Ahora  lo que toca es pasar todas estas horas”, afirmaba la alcaldesa cuando se le preguntaba si tiene previsto solicitar ayudas para afrontar estas reparaciones. Como reconoció, los propios trabajadores municipales y de concesionarias que han montado retenes y han formado parte del operativo coinciden en la agresividad con la que ha azotado el viento, provocando una situación “que no habíamos vivido nunca en Jerez”. Por ello alabó la “coordinación” de todos los dispositivos dispuestos para atender las decenas de incidencias causadas por un temporal que en solo 24 horas dejó más de 100 llamadas a la Policía Local para avisar de incidencias.


La peor parte de este vendaval se la llevó el CEIP La Unión, que hasta el lunes no reanudará las clases después de que las cristaleras de una parte del techo del colegio se vinieran abajo. Ocurrió fuera del horario escolar y los padres se enteraron cuando llegaron al centro para dejar a sus hijos. No ha sido el único colegio que no ha salido bien parado, la lista que ayer detallaba la delegada de Educación, Laura Álvarez, era generosa.  Destacó el caso del CEIP Ciudad de Jerez, donde se desprendió el muro que separa con el campo de fútbol del Pago San José, la caída de árboles en el CEIP José María Pemán, donde varias niñas sufrieron arañones, y en el que también se vino abajo una farola. A esto hay que sumar, parte de la valla que se desplazó en el CEIP  Pío XII se desprendió  una valla exterior, al igual que en El Arana Beato, mientras que en el Antonio de Nebrija también se vino abajo una chapa. También en La Granja se desalojaron las aulas prefabricadas del IES Quiñones tras salir volando la voladura del techo de una de ellas.  Y la lista sigue.


Serios  han sido también los daños en las instalaciones deportivas, en los que se han “destrozado” porterías y han llegado a “volar” hasta ocho metros un banquillo del Campo de La Juventud. Ahora, por tanto, el Ayuntamiento deberá valorar cómo afectan a los eventos programados para este fin de semana ante la falta de margen para actuar. Es el caso del campo de fútbol de Picadueña, las instalaciones de la Granja o las del Pago San José.  De hecho, a excepción  de Piscinas Cubiertas José Laguillo, el Palacio de Deportes, y los polideportivos Ruiz Mateos y José Vega, ‘Veguita’,el resto de instalaciones deportivas permanecieron cerradas, al igual que parques públicos y el zoológico.  
A lo largo del día del miércoles y toda la noche de ayer, la caída de árboles se convirtió en la gran pesadilla en cualquier zona de Jerez, obligando a cortar el tráfico al venirse abajo en una rotonda de la avenida de Arcos. “Ha sido el principal problema”, reconocía el delegado de Medio Ambiente, José Antonio Díaz, que no se atrevía a dar un dato exacto. “Están siendo infinitas”, llegó a decir pues se contaban por decenas. Unas circunstancias que motivaron la puesta en marcha de un turno especial de taladores. Y es que con más de 70 incidencias hasta ayer por la mañana, Jerez se convirtió en la ciudad más afectada de la provincia, cediendo el relevo a partir de media mañana al litoral gaditano.

 

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