La mayoría de los comercios del centro de la ciudad de Barcelona han amanecido cerrados este martes, cuando coinciden la convocatoria de huelga general y el 'paro de país' en protesta por la violencia policial del domingo en los colegios electorales, según ha podido comprobar Europa Press.
Los quioscos de La Rambla, panaderías históricas y tiendas que abren todos los días del año, han decidido bajar la persiana, mientras que algunas cafeterías de grandes cadenas sí han abierto y se han llenado de ciudadanos de a pie, turistas y trabajadores de la construcción que paraban para desayunar.
Otras cadenas como Desigual o Mango, o tiendas de souvenirs, han decidido levantar la persiana, si bien la afluencia de público era escasa, y es que los convocantes del paro han animado a no consumir durante esta jornada para no perjudicar a los comerciantes que cierran en solidaridad por los más de 800 heridos por los cuerpos policiales.