Delegados del sindicato CSIF se han encerrado en el centro penitenciario de Huelva para exigir la equiparación salarial de este colectivo. En concreto, la reivindicación -convocada en todas las provincias a nivel nacional- persigue conseguir la igualdad de salarios con los funcionarios de prisiones de la comunidad autónoma de Cataluña, la única con competencias en materia penitenciaria.
El encierro ha servido como medida de presión para que, desde el Gobierno central, se inicien las negociaciones que abran el camino hacia la equiparación de sueldos de este colectivo. Según los datos de CSIF, las diferencias oscilan desde un mínimo de 1.600 euros (en casos de funcionarios de oficinas) hasta los 25.000 euros si se trata de un director de centro.
La central sindical mantiene abierta una campaña informativa bajo el lema “A igual trabajo, mismo salario” que persigue acabar con la brecha salarial entre colectivos de empleados públicos que realizan las mismas funciones y tienen las mismas responsabilidades pero cobran salarios muy dispares. Esta situación crea una “peligrosa desigualdad entre trabajadores del mismo colectivo” y va generando “una gran desconfianza y desmotivación entre las plantillas”, asegura CSIF.
Además, el sindicato recuerda que los funcionarios de prisiones tienen que asumir el añadido de la peligrosidad asociada a sus funciones a lo que se suman la falta de personal, el aumento de las ratios y la escasez de inversiones. Por ello, los funcionarios de prisiones se ven “continuamente desbordados a la misma vez que va incrementándose la inseguridad en el centro penitenciario”.
Por todo ello, CSIF subraya la necesidad de reconocer la profesionalidad de los trabajadores de la prisión y dignificar su labor. Como primer paso, la central sindical remarca la importancia de conseguir la equiparación salarial y acabar con la discriminación respecto al colectivo de funcionarios de prisiones de Cataluña.La próxima movilización provincial para lograr la igualdad de salarios será el 12 de abril con un nuevo encierro en la prisión onubense.
