El edil Adrián Martínez de Pinillos se ha encargado estos dos últimos años de las competencias delegadas de Protección Civil en Cádiz. Y ante las necesidades que había en la ciudad se ha avanzado, explicó el concejal, después de que algunas de ellas no vieron la luz “durante cerca de 20 años”.
Al Pleno iban tres planes de actuación local ante riesgo sísmico; ante contaminación en el litoral y transporte de mercancía peligrosas. Ahora comienza el proceso de implantación, donde colaboran todas las instituciones relacionadas con las emergencias y cuerpos de seguridad. Tras su aprobación, estos planes deberán ser homologados por la Junta, aunque tienen que pasar por exposiciones públicas. Posteriormente, se pondrán en marcha jornadas divulgativas, se convocará la Junta de Protección Civil y se pondrán en marcha los simulacros.
“El Estado desarrolló unas directrices que se aplican en las autonomías y posteriormente en los términos municipales”. El de mercancías peligrosas hace tres años que lo terminó de desarrollar la Junta “que tardó diez años en elaborarlo” y “nosotros en año y medio hemos desarrollado este trabajo”.
En paralelo, se ha trabajado en el de contaminación en el litoral, que tendría que haber estado desde 2002 y el de terremotos desde 2008, aseguró el edil del Gobierno local. Actúan de manera preventiva ante los riesgos, matizó el portavoz del equipo de Gobierno, quien puntualizó que ahora desde el Gobierno local se está trabajando ante la información que requieren los vecinos acerca de cuáles son los riesgos que puede haber en sus ciudades. Es garantizar el dereho a la información. Usando palabras de Íñigo Errejón, el concejal de Protección Civil explicaba que el principal núcleo irradiador es el ser garantizador de derechos, como se ha hecho en otros ámbitos como la vivienda, el empleo, al seguridad y las fobias.
Una de las cosas que debe saber el ciudadano es que para que se dé un maremoto, primero debe tener lugar un terremoto y “nosotros estamos empezando a estar protegidos ante ese primer problema”. La devastación de un maremoto arranca con la que provoca el terremoto, el pánico de los ciudadanos... Si se puede “minimizar el resultado que puede tener un terremoto, conseguiremos que lo que provoque un maremoto tenga una menor incidencia”, aseguró el edil. Sobre el plan ante los maremotos recordó que en 2018 se han elaborado las directrices desde el Estado. Martínez de Pinillos explicó que ahora es la Junta la que está inmerso en su elaboración. Confía en que no se tarde tanto desde el Gobierno andaluz a la hora de desarrollar el texto cto Texto apoyo Amplitude Light, cuerpo 8,8
Trasladó varios consejos a los ciudadanos: ponerse en un lugar alto -en una segunda o tercera planta es suficiente; estar siempre informado a través de los medios oficiales, para lo que se usará la radio -evitando así problemas con los rumores o bulos que generan mayor confusión; mantener la calma y permanecer en el lugar donde te ha pillado el terremoto (por ejemplo, los colegios tienen sus propios planes de autoprotección. Los menores estarán más preparados en el centro que en movimiento). El impacto de un terremoto en el Casco Histórico puede ser más intenso que en Extramuros, aunque por densidad de población se notaría más en Extramuros.
Estos planes ya han empezado a funcionar, y por ejemplo, se ha pedido a las empresas de suministro de combustible que lo hagan en horario nocturno para que la incidencia en los ciudadanos sea menor que hasta ahora.