Atléico Zabal 0
El Chiclana se aprovechó de los tropiezos de sus rivales directos para acercarse a la zona alta de la clasificación, después de cuatro jornadas sin lograr la victoria. Sin embargo, los de Bolli lograron un merecido triunfo este domingo ante el Atlético Zabal, gracias al centrocampista Carlitos que anotó los dos tantos chiclaneros.
El conjunto local inició el encuentro con la presión de la mala racha de resultados, tras no conocer la victoria desde la segunda jornada de Liga ante el Olont, el pasado 13 de septiembre. A pesar de ello, el equipo que dirige José Alba Bolli pronto comenzó su asedio sobre el área linense, aunque sin acierto en el remate. Carlitos se echó el cuadro chiclanero a sus espaldas y protagonizó las primeras oportunidades de gol antes de que se cumpliera el minuto 15. Así, en tres ocasiones, el centrocampista chiclanero pudo adelantar a los locales, pero el guardameta Chicón y la falta de puntería evitaron que el cuadro blanco pudiera adelantarse en el marcador en los primeros instantes de partido.
El juego se convirtió en un monólogo chiclanero, puesto que los futbolistas del Atlético Zabal tan sólo se limitaban a defender el resultado inicial. Además, la expulsión del centrocampista linense Domingo, que derribó a Lozano en la frontal del área cuando el ariete local se plantaba sólo ante el portero rival, provocó que el dominio chiclanero fuera aún más atosigante.
El único que intentó llevar el peligro sobre el marco del portero local Alberto fue el delantero Tostao, que disparó en tres ocasiones sobre la portería local antes del descanso, pero el guardameta blanco tan sólo tuvo que intervenir en uno de los lanzamientos, aunque sin problemas. Con la igualada en el marcador se llegó al término de los primeros 45 minutos.
Ya en la reanudación, los locales saltaron al terreno de juego con ganas de materializar pronto el dominio en una aburrida primera parte. Así, tras desaprovechar el visitante Selu un balón muerto en la frontal, Carlitos no falló ante el guardameta Chicón, después de aprovecharse de un mal despeje de la defensa del Atlético Zabal.Tan sólo se había cumplido el segundo minuto de la reanudación y el Chiclana ya dominaba en el marcador del Municipal de Deportes.
El tanto de Carlitos animó a sus compañeros, que buscaron rápidamente un segundo gol, que sentenciara definitivamente el partido. Así Lozano estrelló el esférico al cuerpo del portero rival, en un mano a mano claro para el ariete local, que no estuvo acertado en la definición. Por su parte, Flor remató sólo de cabeza un córner ejecutado por Carlitos, pero el balón se marchó junto al palo derecho de la portería linense. Apenas se había cumplido el minuto seis de la segunda mitad y los de Bolli se lamentaban de no haber sentenciado definitivamente el encuentro. Por su parte, Tostao seguía su su particular lucha ante la defensa chiclanera, sin acierto.
Poco a poco, el ritmo de partido bajó considerablemente, lo que provocó que los pocos aficionados que se acercaron al Municipal de Deportes se desesperasen, a sabiendas de que el Chiclana era muy superior al Atlético Zabal, que jugaba con un futbolista menos. Tan sólo Carlitos intentaba animar el juego de los locales, pero sus intentos eran abortados por la defensa visitante. A pesar de ello, a falta de 20 minutos para el final del encuentro, el centrocampista chiclanero volvió a demostrar su calidad en un lanzamiento desde la frontal del área, que se coló por la escuadra izquierda de la portería de Chicón, que nada pudo hacer para evitar el segundo tanto local.
El choque finalizó definitivamente ahí, puesto que los visitantes bajaron los brazos y se conformaban con no encajar ningún gol más. Por su parte, el cuadro de Bolli comenzó a controlar el juego en el centro del campo, con el objetivo de evitar sorpresas en los últimos minutos. Tan sólo el linense Javi Cote intentó acortar distancias, pero Alberto protagonizó la parada de la tarde en el Municipal.
Con esta victoria, el Chiclana suma 12 puntos y asciende varios puestos en la clasificación, antes de visitar la próxima semana al San Roque.