La Diputación de Málaga está llevando a cabo un plan antidesprendimientos en la red viaria provincial con la instalación de mallas metálicas y muros de escollera y de mampostería para evitar la caída de rocas, piedras o árboles a las carreteras.
El diputado de Fomento e Infraestructuras, Francisco Oblaré, ha explicado que las actuaciones se centran en reforzar la protección de los taludes para evitar desprendimientos y mejorar el drenaje de las plataformas en vías de la provincia, la mayoría de ellas de montaña.
Las actuaciones que se han desarrollado han supuesto una inversión de 1,6 millones de euros, interviniendo en más de una docena de vías, entre las que destacan los trabajos en la MA-3300 Alhaurín de la Torre-Alhaurín el Grande y en dos carreteras de la Serranía de Ronda de acceso a Jubrique y a Genalguacil, han explicado desde la Diputación a través de un comunicado.
Oblaré ha resaltado el esfuerzo que está realizando la institución provincial no solo para mejorar el firme y el trazado de la red viaria provincial, sino también llevando a cabo medidas que contribuyen a garantizar su mantenimiento y conservación y a hacer más seguro el tránsito por las carreteras.
De igual modo, ha recordado que también se va a desarrollar el Plan Víable, que va a permitir mejorar notablemente las comunicaciones viarias en más de 40 pequeños municipios del interior de la provincia acondicionando caminos rurales. Se trata de una de las medidas de la Diputación de Málaga para luchar contra el despoblamiento rural.
Dentro del plan antidesprendimientos, se han ejecutado, hasta ahora, casi 22.000 metros cúbicos de muros de escollera y mampostería a una altura media de 2,5 metros y de un metro de espesor. Igualmente, se han instalado 16.180 metros cuadrados de mallas metálicas de triple torsión para protección de taludes, ancladas con barras de acero corrugadas y sujetas con piquetes de anclaje.
