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CSIF reclama la autorización para las 12 plazas de policías portuarios de verano

El sindicato insta a Puertos del Estado a desbloquear la situación, que afecta a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras

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  • Policía Portuaria de Algeciras. -

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha exigido, por escrito, a través de una carta, al presidente de Puertos del Estado, Francisco Toledo Lobo, que “agilice la autorización de los doce contratos temporales que en esta época se asignan para cubrir vacaciones y reforzar los servicios a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA), que es el primer puerto de España en tráfico total de mercancías”.

CSIF señala que “la APBA sabe que se está a expensas de un informe favorable por parte del Ministerio de Hacienda que es quien da viabilidad y ostenta potestad para autorizar esas contrataciones. CSIF exige al presidente su colaboración para resolver ya este problema”.

El sindicato lamenta que “la gran mayoría de los trabajadores eventuales (que aprobaron en las últimas bolsas de empleo) debido al Covid-19, no han podido prestar sus servicios. Es más, algunos de ellos ni se han llegado a vestir con el uniforme. De ahí la urgencia que traslada CSIF para resolver esta situación”.

Bolsa anulada
El pasado 15 de julio el propio sindicato CSIF dio a conocer que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) le había dado la razón al declarar nula la bolsa de empleo de Policía Portuaria de Algeciras del año 2017, por “una serie de irregularidades en las pruebas de acceso. Con esta sentencia se obliga a la Autoridad Portuaria a cambiar las bases de la convocatoria, en las que, entre otras cosas, se abusa de las pruebas psicotécnicas”.

La sentencia del TSJA, indica el sindicato, recoge “los argumentos que aportaba CSIF en su denuncia, por la falta de concreción en los criterios de selección”. El documento señala que “los términos empleados para definir los méritos carecen de la concreción indispensable para permitir una comparación entre los diferentes candidatos, e impide a éstos conocer por anticipado qué se pide y con qué grado”. Es decir, “tal y como estaba redactada la convocatoria, los candidatos no pueden saber en qué consisten las pruebas ni qué se evalúan en ellas”.

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