A ver. Quiero escribirte, y no sé muy bien cómo hacerlo. Como si te hablara del buen trabajo de Bomberos, Cruz Roja, Protección Civil, Seprona, Infoca, cuerpos sobre los que existe unanimidad en la sociedad acerca de su abnegada e importante labor. No hay duda. Pues exactamente lo mismo, o parecido quiero hacer hoy con las Fuerzas Armadas. Y, claro, ya en este punto muchos no estaréis de acuerdo con la comparación. Probablemente tendréis razón, pero permitidme el desarrollo de mis argumentos. ¡Leer un poco más, por favor! Spielberg nos cuenta en Salvar al Soldado Ryan cómo un grupo de osados soldados sacrifican sus vidas por una. No tenemos que irnos a la ficción. Más cerquita en el espacio y en el tiempo vemos cómo cada año aparecen las siglas UME en informativos de radio, prensa y televisión. Hemos visto cómo estos umes han salido ovacionados de pueblos de la geografía andaluza y española tras paliar los efectos del fuego o de riadas. No llevan cetmes (qué antiguo) ni carros de combate (por favor, no son tanques) pero pertenecen a la Unidad Militar de Emergencias de las Fuerzas Armadas, creada vía Consejo de Ministros en 2005. Hete aquí que mañana, 1 de junio, va a tener lugar el tradicional desfile del Día de las Fuerzas Armadas en Sevilla que, es cierto, resulta un poco (bastante) trasnochado y propio de otros tiempos, pero que supone un ejercicio de cercanía del pueblo a sus Fuerzas Armadas. ¿Y esto es bueno? Pues yo creo que sí. Una vez al año no hace daño. Provoca incomodidades, ruidos y retrasos en los vuelos comerciales durante los días previos al desfile, pero lo de mañana promete ser un espectáculo, digno de unos ejércitos del siglo XXI que participan en misiones humanitarias por todo el mundo, siempre bajo la bandera de Naciones Unidas. Los soldados y sus mandos han evolucionado tanto como lo ha hecho la sociedad española durante las últimas décadas. La profesionalidad es el común denominador de nuestras Fuerzas Armadas. Ahora, tras estas líneas, eres tu quien debes decidir si salvarías o no al soldado Ryan a cambio de la vida de un puñado de valientes.