Ante esta circunstancia, el Hospital de Jerez activó los dispositivos de emergencias que permiteron el funcionamiento de las instalaciones. Así, los generadores alternativos fueron los encargados de sostener los equipamientos eléctricos de manera que no se detectó ninguna incidencia en la atención vital de los pacientes.
El Hospital cuenta con un transformador general y cuatro centros de transformación que suministran electricidad a determinadas zonas de referencia; el fallo se produjo en uno de ellos, de manera que una vez localizado e intervenido, el centro recuperó la luz.
Desde el comienzo de la incidencia, la dirección gerencia del centro mantuvo un gabinete de crisis para centralizar las instrucciones a todas las áreas, de manera que las molestias fueran las mínimas para los ciudadanos.
Así, se reforzaron los puntos de atención al usuario para que tuvieran toda la información y se prestó especial atención a Urgencias, hospitalización, Consultas Externas, los dispositivos de apoyo y de mantenimiento; en todas estas zonas se estuvo trabajando con normalidad a excepción de Consultas Externas, donde se tuvo que usar las historias clínicas de papel, ante la caída del sistema informático, ya restablecido con normalidad.
