La sevillana Miriam Seco es la única arqueóloga española que dirige una excavación en Luxor, donde está al frente de las excavaciones del templo del faraón Tutmosis III, done el próximo otoño realizarán prospecciones para delimitar el embarcadero, que sería el primero localizado en la zona.
Seco excava en Luxor (Egipto) desde 2008 en el que fuera el templo funerario del faraón, que, según ha explicado a Efe en una entrevista, "estaba abandonado desde los años 30 y, de hecho, el último arqueólogo que estuvo allí fue en 1938".
En este templo "hay muchas expectativas y mucho material inédito por descubrir", ha asegurado.
En la primera campaña de 2008 el equipo que dirige Seco encontró un antiguo almacén que había quedado olvidado y del que extrajeron piezas que habían sido enterradas en la excavaciones de 1906 y de los años 30.
"Encontramos casi 2.000 fragmentos con relieves y decoración de las paredes de las capillas del templo, algunos de ellos con la policromía original", apunta.
En la segunda campaña de 2009, la intervención arqueológica se centró en la entrada del templo, donde hay casas que eran factorías de alabastro, una área en la que "se encontraron las esquinas de los pilonos, de las fachadas y parte del suelo original, así como una serie de tumbas anteriores a la construcción del templo".
El año pasado excavaron una de las cámaras funerarias, en la que hallaron restos de cuatro sarcófagos, del Imperio Medio.
En otoño de 2010, anuncia Seco, su equipo de arqueólogos estudiará la zona de entrada al templo y, "lo más importante, frente a la entrada, pues todos estos templos funerarios tenían unos embarcaderos".
Para localizar esta zona del templo de Tutmosis III, Seco ordenará una serie de "sondeos y estudios con georradar para ver qué restos se conservan del embarcadero y eso dará una información muy valiosa porque en pocos templos se ha podido excavar esta zona de embarcadero".
Dado que la carretera pasa por encima del patio del templo, la arqueóloga sevillana ha programado asimismo hacer un estudio de georradar para ver qué hay debajo del asfalto.
Considerado el "Napoleón egipcio", Tutmosis III es, recuerda Seco, uno de los faraones más importantes del Imperio Nuevo y en su reinado Egipto alcanzó un esplendor político y de expansión y las fronteras llegaron a su auge tanto por el norte como por el sur, después de 17 campañas militares.
Desde 2006, Seco trabaja también en una excavación en el mar, a 4,5 kilómetros de la costa de Tiro (Líbano), donde se hundió un pecio con un cargamento de estatuas fenicias de terracota del siglo V a.C.
"En las tres campañas arqueológicas realizadas desde entonces en Tiro hemos sacado del mar casi unas 300 estatuas", informa Seco, entre ellas diosas de la fertilidad, de sacerdotes y otras que son guerreros.
Las estatuas, producidas en la misma Tiro, quedaron esparcidas a 34 metros de profundidad por el fondo del mar en una zona de muchas corrientes.
Hasta ahora, asegura la arqueóloga española, "nunca se ha hecho un estudio de la tipología estatuaria".
Seco subraya que tanto en un proyecto como en otro se han volcado las autoridades académicas locales (los Servicios de Antigüedades de Egipto y Líbano), la Embajada española en El Cairo, la Academia de Bellas Artes de Sevilla, el Ministerio de Cultura y la Junta de Andalucía.
En el caso de Luxor, las campañas habían sido financiadas hasta ahora por Fecsa y a partir de 2010 se sumará la Fundación Emilio Botín, "lo que permitirá hacer campañas más largas, de tres meses", y en Tiro, las tres primeras actuaciones fueron financiadas por Cajasol.