A una semana del inicio de la primavera, el calor veraniego de los últimos días comienza a estabilizarse para dar paso a unas jornadas con pocas lluvias y un ambiente templado, entre 20 y 25 grados en las horas centrales del día, aunque más fresco por la noche.
La primera mitad de esta semana estará marcada por el "tiempo anticiclónico", con borrascas solo en el norte del país y con "ascensos y descensos de las temperaturas", ha avanzado, Rubén del Campo, portavoz de Aemet, quien resalta una "acusada" amplitud térmica entre el día y la noche en zonas del interior peninsular.
Esta situación se aleja mucho de los valores registrados durante el fin de semana, sobre todo en el área mediterránea, donde el sábado se midieron valores máximos de hasta 31,8 grados en Elche (Alicante) y 31,1 grados el domingo en Xativa (Valencia).
Las noches también fueron cálidas, y así en la localidad de Pego (Alicante) y en Pollensa ( Mallorca) no se bajó de 20 grados dando lugar a una noche tropical, un fenómeno muy poco habitual en el clima peninsular en el mes de marzo.
Respecto a temperaturas máximas absolutas y mínimas más altas para el mes de marzo se lograron récords: el sábado en Castellón-Almazora se llegó a 30,8 grados, un récord de máxima absoluta que no se batía desde 1981, con 30,2 grados en marzo de 1981; la mínima fue de 19,4 grados, que superan los 19 grados de marzo de 2001.
En Palma de Mallorca, la máxima fue de 27,3 grados cuando el récord anterior fue de 26,6 grados en 1981, mientras que la mínima dejó 16,8 grados, superando a los 16,3 grados de marzo de 2013.
Este lunes lo más destacado será el viento del oeste que dejará rachas muy fuertes superiores a 70 u 80 km/h en el norte y este peninsular, además de temporal marítimo en el Cantábrico con olas de hasta 7 metros; las temperaturas bajarán por el noroeste, pero subirán en el tercio oriental peninsular por el efecto de los vientos del oeste que llegan recalentados.
El martes el viento girará al noroeste y favorecerá el descenso de las temperaturas, sobre todo en el este de la Península, donde en algunos puntos podría ser extraordinario, es decir, de más de 10 grados con respecto al día anterior: Es el caso de Zaragoza, que este lunes superará los 30 grados y mañana apenas los 19 grados.
Dicha jornada, las lluvias quedarán restringidas a Galicia, Cantábrico Oriental y Pirineos, con nevadas a partir de unos 1.300 a 1.500 metros; además seguirá el temporal marítimo del Cantábrico con olas de 7 metros y con rachas muy fuertes en el este de la Península y en Baleares.
El miércoles, con el anticiclón centrado sobre la Península, los vientos serán flojos y más cálidos que en el día anterior y permitirán un mayor calentamiento diurno lo que favorecerá que, en las horas centrales del día, las temperaturas estén en muchos casos entre 4 y 6 más altas que el martes.
La excepción será el litoral Mediterráneo, donde las brisas procedentes del mar, todavía bastante frío, dejarán un ambiente más fresco; aún así, Murcia superará los 25 grados, Valencia unos 22 grados y el Valle del Ebro, Centro y Sur peninsular, los 20 grados.
Este día, la amplitud térmica en puntos del interior del país podrá ser superior a 20 grados: Por ejemplo en ciudades como Soria, Palencia o Salamanca las mínimas estarán entre 0 y 2 grados y las máximas rondarán los 19 a 21 grados.
El jueves dejará de nuevo tiempo estable y ambiente templado con valores cercanos a 20 grados a mediodía en amplias zonas de la Península y 25 grados en los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir, aunque a últimas horas se empiece a notar por Galicia la llegada de una borrasca.
El viernes, el frente asociado a esta borrasca atravesaría la Península perdiendo fuerza en su recorrido, por lo que las lluvias más abundantes ese día se darán en el norte peninsular y serán más débiles en el resto de la mitad oeste, con alguna llovizna en la zona centro.