El escritor José Manuel Caballero Bonald, que recibió en la noche de ayer el VI Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca, ha reivindicado “las soluciones justicieras de la inteligencia, los viejos métodos humanísticos de la razón”, en un mundo como el actual, “asediado de violencias y desmanes”.
Durante su intervención en el Carmen de los Mártires de Granada, Caballero Bonald dijo que quizá se trate su reivindicación de una utopía, “pero la utopía también es una esperanza consecutivamente aplazada”.
“De nuevo habrá que confiar en que esa esperanza también se nutra de los frutos generosos de la inteligencia”, manifestó el escritor, que concibe la poesía como “un buen sistema para defendernos de todo lo que nos impide ser más íntegros y felices”.
Emocionado por haber sido premiado con el galardón que lleva el nombre de García Lorca, lo que consideró “más que una coincidencia feliz”, Caballero Bonald inició su discurso afirmando que su palabra escrita reproduce sus “ideas estéticas”, pero también su “pensamiento moral” y su manera de entender la historia.
“En mi obra está implícito todo lo que pienso y hasta lo que todavía no pienso. Incluso podría añadir que la literatura me ha enseñado a vivir más plenamente mi vida”, continuó el poeta, que ironizó sobre su “tenacidad duradera” como literato.
A la entrega del premio, enmarcado en el Festival Internacional de Poesía de Granada, también asistió el consejero andaluz de Cultura, Paulino Plata, que se refirió al galardonado como “un poeta inconmensurable” cuyo legado hay que preservar, a lo que contribuirán, dijo, iniciativas como la próxima puesta en marcha del centro Lorca de Granada.
Por su parte, el alcalde de Granada, José Torres Hurtado, confió en que la ciudad, cuya herencia supo reflejar García Lorca “como nadie”, luzca pronto el título de Capital Mundial de la Poesía.
El acto, al que asistieron representantes del mundo de la cultura y el arte como Miguel Ríos o Ernesto Cardenal, se cerró con un concierto del cuarteto de cuerda Ars Nova.
Hijo Predilecto de Andalucía, Caballero Bonald nació en Jerez de la Frontera en 1926, estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Sevilla y publicó su primer libro de poesía en 1952 bajo el título de Las adivinaciones.
Entre su obra poética destacan libros como Las horas muertas, Descrédito del héroe o Laberinto de Fortuna, a las que se suman sus publicaciones más recientes Diario de Argónida, Manual de infractores y La noche no tiene paredes.
premios
Desde que comenzó su carrera literaria ha recibido numerosos galardones como el Premio de Poesía Platero, que se le concedió en 1950; el de la Crítica, el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana y los premios nacionales de las Letras Españolas y de Poesía.
El galardonado, que ya optó al Premio García Lorca en la pasada edición, ha competido esta vez con otros 35 candidatos de quince países.
Caballero Bonald es el sexto poeta que recibe esta distinción, que en ediciones anteriores recayó en Tomás Segovia (2008), Francisco Brines (2007), Blanca Varela (2006), José Emilio Pacheco (2005) y Ángel González (2004).
Dotado con 50.000 euros, el Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca es considerado el de mayor cuantía de este género en habla hispana.