El incendio declarado el pasado 19 de agosto en la región de Evros, en el noreste de Grecia, sigue desafiando a los centenares de bomberos que intentan contener las llamas, una labor que se complicó este jueves debido a rebrotes atizados por fuertes vientos.
El primer ministro heleno, el conservador Kyriacos Mitsotakis, lo calificó hoy de "megaincendio", pues es el mayor registrado hasta ahora en Europa, con más 80.000 hectáreas calcinadas en trece días.
Según informa la radiotelevisión pública ERT, la situación se ve agravada por los fuertes vientos procedentes del sur, pese a lo cual las fuerzas de extinción terrestres lograron desviar la dirección del fuego, que amenazaba áreas residenciales.
El frente activo se encuentra actualmente cerca del pueblo de Kotronia, localizado en el límite occidental del parque nacional forestal de Dadia, donde los bomberos encontraron el pasado día 22 los cuerpos carbonizados de 18 personas, entre ellos dos niños.
Las autoridades estiman posible que se trate de refugiados que entraron en Grecia desde la cercana Turquía de forma irregular.
Los medios griegos califican la situación en esta zona del país de "desesperada".
Cerca de 500 bomberos con un centenar de vehículos participan en las tareas para contener las llamas. Además, seis aviones cisterna y cuatro helicópteros ayudan en los esfuerzos de extinción.
España, en el marco del mecanismo de respuesta de emergencia de la Unión Europea (UE), envió dos aviones adicionales que se sumaron a los ya enviados por Francia, Alemania, Suecia, Croacia, Chipre y la República Checa.
Según Bruselas, se trata de "la mayor operación aérea de extinción de incendios en la UE hasta la fecha".
Otros dos nuevos incendios se declararon hoy, uno en una zona forestal en las afueras de la ciudad de Kilkis, en Macedonia central, y otro en Kalamata, en la periferia del Peloponeso, sin que hasta el momento amenacen zonas pobladas.
En un debate en el Parlamento griego, Mitsotakis volvió hoy a vincular a la crisis climática la dimensión "sin precedentes" de la ola de incendios de este año.
"La crisis climática está aquí, amenazándonos cada vez más a todos", dijo el jefe de Gobierno, al tiempo que abogó por que los países mediterráneos cooperen más para desarrollar nuevas estrategias contra estas catástrofes.
"Aprendemos de nuestros errores, pero deberíamos estar de acuerdo en un supuesto común: que las amenazas climáticas van a menudo un paso por delante de las defensas humanas", destacó.
En total, en lo que va de 2023, en Grecia han ardido ya unas 150.000 hectáreas, más del 1,1 % de la superficie total del país, en el segundo peor año desde 2007 en lo que a territorio calcinado se refiere.
De esa superficie, más de 80.000 hectáreas han sido calcinadas por el incendio de Evros, según los datos del Servicio de Vigilancia Terrestre de Copernicus.