Aarón hace bueno el juego amarillo

Un gol de Aarón Bueno en el tiempo de descuento permitió al nuevo Cádiz de Hristo Vidakovic sumar sus primeros tres puntos en Segunda B. Y no son estos tres puntos cualquiera, sino tres que se suman a costa de un teórico rival directo en la lucha por recuperar la categoría de plata del fútbol español.

El juego local tuvo luces y sombras durante todo el partido y la victoria no debe tapar las carencias de un equipo al que aún le falta mucho camino por recorrer si quiere convertirse en un aspirante al ascenso a Segunda.
Repitió Vidakovic el mismo once titular que había utilizado para jugar ante el Parla en partido de Copa del Rey. No fue ninguna sorpresa porque ni la plantilla es precisamente larga ni todos sus integrantes están en plenitud de condiciones físicas. Así las cosas, ya durante la semana avisó el nuevo técnico cadista que jugarían los que mejor están, algo que también vislumbra cambios conforme hombres de la categoría de Pachón y Aarón bueno vayan cogiendo su mejor ritmo.

Comenzó bien el Cádiz, jugando con sentido y dominando a su rival, fruto de lo cual las ocasiones fueron llegando. Un taconazo de Fran Cortés dentro del área dejó solo a Enrique, pero el disparo del extremeño no causó peligro.
De nuevo Enrique tendría el gol en sus botas cuando un buen pase de Fran lo dejó en solitario, aunque con mucho campo por delante para encarar la meta defendida por Adrián. El 8 cadista no quiso terminar él mismo la jugada cuando parecía lo más fácil y desde el inicio de su carrera ya iba mirando el desmarque por el centro de Velasco, al que cedió el balón en no muy buenas condiciones por lo que remate quedó en nada y la ocasión se perdió.
Sin embargo, la ocasión más clara la disfrutaron los visitantes, que al saque de un córner remataron para que Dani Miguélez despejara el balón sobre la misma línea pese a las peticiones de gol de algunos jiennenses.
No se sentía cómodo Enrique jugando en punta, así que terminó cambiándole su posición a Velasco para volver a la derecha y dejar a su compañero en punta. La ausencia de un delantero claro lastraba el juego de un Cádiz obligado a experimentar para suplir sus carencias.

A la media hora, de nuevo una jugada a balón parado causó problemas a los locales. Bien es cierto que el sol impidió la perfecta visión de Dani Miguélez para despejar, pero este tipo de acciones fue la cruz del equipo durante la pretemporada y tiene pinta de seguir siéndolo durante la Liga.

Pero precisamente a balón parado llegó el 1-0. Carlos Caballero botó una falta escorada a la derecha de Adrián y batió al meta rival de forma directa. Cuando todos esperaban el centro, un certero disparo del madrileño pegaba en el palo corto del Jaén y se alojaba en la portería. Un buen gol para iniciar la temporada.

BUSCANDO UN JUEGO MÁS RÁPIDO
Los aspersores funcionaron a pleno rendimiento durante el descanso, pero sólo en la mitad del campo en la que atacaría el Cádiz a partir de la reanudación. La búsqueda del juego rápido que plantea Vidakovic necesita un césped también rápido y eso es lo que se buscó al regar.

Sin cambios comenzó la segunda parte, ni en las alineaciones ni en el juego, con un Cádiz dominando y disfrutando de su primera oportunidad a los cuatro minutos por medio de un disparo al centro de Velasco.
Dani Miguélez demostró sus reflejos atrapando en dos tiempos el saque de una falta por parte del rival. No era fácil porque tenía a veinte futbolistas delante tapándole la visión, pero el gaditano actuó bien una vez más.
Aarón Bueno y López Silva suplieron a Velasco y Dieguito par a dar aire fresco a las bandas, manteniéndose en el campo un Enrique cansado y muy caliente con el árbitro, que le había mostrado una tarjeta amarilla provocada por las absurdas protestas del cadista.

El Real Jaén se echó poco a poco al ataque y lo corto del marcador hacía temer lo peor porque, aunque los locales no defendían mal, algunos desajustes llevaron el miedo a las gradas. En estas, un disparo de José Mari al cortar con facilidad un mal pase en la medular de Caballero a Fran Cortés a punto estuvo de costar un disgusto. El empuje visitante y la clara bajada de nivel físico local hicieron prever el desastre.

Una falta clara de Álvaro Silva sobre Fernando en la frontal no fue pitada por el colegiado, que aplicó muy bien la ley de la ventaja al ver que el esférico llegó a los pies de Iván Zarandona, cuyo disparo se alojó en las mallas de Dani entrando pegado al palo izquierdo del meta gaditano.

Con el empate a un tanto y diez minutos por delante, Vidakovic retiró a Enrique para dar entrada a Sergio Pachón, pero la mala pinta que había tomado el partido ya no era nada fácil de remediar. Ya con el tiempo de descuento estipulado, Álvaro Jurado tuvo el gol en sus botas. Una magnífica jugada de López Silva por la derecha terminó con un pase atrás perfecto que dejó sólo a su compañero, pero el disparo del mediocentro se marchó fuera.

Y cuando todo parecía destinado al empate en el primer derbi andaluz de la temporada en el Ramón de Carranza, un balón templado por Carlos Caballero por encima de la defensa fue peinado por Aarón Bueno batiendo a Adrián. Fue un tanto inesperado y salido de la nada cuando menos se esperaba y el empate era incluso dado como mal menor visto el bajón mostrado por el juego local en la segunda parte.

Con muchos aspectos que corregir, Vidakovic tiene por delante un largo trabajo, pero ya con el respaldo de haber conseguido la primera victoria y situarse en los primeros lugares de la tabla.