Según explicó el secretario general del PP-A de Jerez, Antonio Saldaña, la iniciativa surge ante la “fiebre que parece le ha dado” a la regidora por inaugurar estas obras y ante el temor de que algunas actuaciones puedan ponerse en servicio antes incluso de que estén finalizadas con el objetivo de rentabilizarlas desde el punto de vista electoral.
Una de las principales preocupaciones del PP es que la ejecución de determinadas obras se inicie sin que esté asegurada su financiación, ya que “una cosa es que tengan consignación presupuestaria y otra distinta que luego haya dinero para pagarlas”. Además, Saldaña advirtió de que el intento de acortar los plazos de ejecución de estas actuaciones suele traducirse en un incremento de los costes iniciales.
El dirigente popular aludió, por ejemplo, a las obras del Museo de Lola Flores, cuyo inicio se ha anunciado en reiteradas ocasiones a pesar de que Saldaña tiene constancia de que aún no se ha llegado a un acuerdo con los inquilinos del Palacio de Villapanés, que estarían poniendo “impedimentos” a su traslado. Algo parecido ocurre con las obras de la Comisaría conjunta, cuyo inicio es “inminente” según el Gobierno local a pesar de que el Estado aún no ha cedido el suelo sobre el que debe construirse este equipamiento. En el caso del centro de barrio de Cuartillos, los populares sospechan que la demora en el inicio de los trabajos se debe a que el suelo debe ser desafectado por la Junta de Andalucía.
Al margen de las dudas que presentan determinadas actuaciones acogidas a los planes E y Proteja, Antonio Saldaña aludió también al desdoble de la antigua carretera de circunvalación (avenida Reina Sofía). Los populares quieren saber si el Ayuntamiento tiene garantizada la financiación de estas obras o si, por el contrario, pretenden “dejar un regalito” al próximo Gobierno local.
El Ejecutivo socialista respondió a estas cuestiones con un comunicado en el que acusó al PP de tratar de “tapar todo lo que este Gobierno ha hecho en la ciudad”. De igual modo, el Ejecutivo que preside Pilar Sánchez considera que estas preguntas suponen “una burla a la ciudadanía”, calificando además de “informe de la señorita pepis” el escrito presentado por los populares. Según el Gobierno local, esta denuncia pública pone de manifiesto que “el PP tiene envidia de la mala por lo que no supo y quiso hacer cuando gobernó”.