Chaves, que asistió a la inauguración en Granada de la ampliación de la planta de los laboratorios Abbott, manifestó que la Junta hará “todo lo posible” por que esa posibilidad sea finalmente una “hipótesis no probable”.
Mostró su convencimiento de que la inversión de “miles de millones de euros” que tanto el Gobierno central como el autonómico han dedicado a la contratación de mano de obra dará resultados “a medio plazo”, probablemente a final de este semestre, lo que a su juicio contribuirá a que Andalucía no llegue al millón de parados.
Entre esas inversiones se refirió a las incluidas en los planes de competitividad o infraestructura, que suman más de 70.000 millones, y a los 8.000 millones del fondo municipal puesto en marcha por el Gobierno central.
Aunque consideró que en materia de inversión tanto el Gobierno central como el autonómico han “hecho los deberes”, Chaves señaló que la Junta procurará poner en marcha “una serie de medidas” que complementen a las ya existentes.
El presidente de la Junta dijo que las dos preocupaciones principales del Gobierno andaluz son la situación de las familias afectadas por el paro o a punto de que terminen sus prestaciones por desempleo, y la de las empresas que se vean abocadas a presentar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
Interrogado sobre si le preocupa la posibilidad de que las protestas de los trabajadores de Boliden se extiendan a otros sectores laborales, Chaves dijo que el próximo martes tendrá lugar la primera reunión con sindicatos y empresarios para iniciar la negociación del séptimo acuerdo de concertación, que definió como un “pacto social” porque será “más amplio” que los anteriores.
“Queremos que -el pacto- recoja el sentir y los problemas de los trabajadores”, dijo Chaves, para quien el caso de Boliden no es “representativo de la clase trabajadora” porque se trata de un grupo “muy pequeño” que “tienen ofertas de trabajo y no las han querido aceptar”, situación que “contrasta” con la que viven los “miles de trabajadores que en estos momentos están en el paro”.
Reunión con las cajas de ahorro andaluzas
Por otro lado, Chaves apuntó que en la reunión que mantendrá hoy con los responsables de las cinco cajas andaluzas pretende analizar la situación de las entidades financieras y “apretar un poco las tuercas” para que el préstamo se vaya normalizando.
Chaves adelantó que en el encuentro analizarán los problemas de “liquidez, solvencia y morosidad” que pueden estar afectando a las cajas y cuál es la demanda actual de créditos y préstamos por parte de las familias.
Se trata de “resolver esos problemas en su conjunto” y de “apretar un poco las tuercas” para que la concesión de créditos y préstamos se vaya normalizando, explicó Chaves, para quien en estos momentos de crisis “es también una responsabilidad que corresponde a las entidades financieras”.
Aunque consideró que puede estar dándose la circunstancia de que con la crisis haya habido una reducción de la demanda, precisó que el “sentir de la ciudadanía” es que hay más dificultades para acceder a un crédito.
Por su parte, fuentes de las entidades financieras precisaron a Europa Press que en el encuentro se prevé que Chaves “transmita un mensaje similar al emitido por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero” en su reunión con las principales entidades financieras del país, aunque apuntaron que “estamos dando crédito, refinanciando y dando impulso al empleo”.
Asimismo, aprovecharán para demandar a la Junta que reanude las subastas de tesorería, una medida “absolutamente útil para el mercado”. Ya el pasado mes de noviembre un total de 17 bancos y cajas de ahorros que operan en Andalucía y que prestan servicios para la Junta de Andalucía aseguraron hoy que la contratación de operaciones y gestión de tesorería “se ha efectuado conforme a los principios de transparencia y libre concurrencia, así como con respeto absoluto a la normativa vigente”.
