Las Hermandades, Cofradías y Agrupaciones Parroquiales diocesanas iniciaron el curso cofrade en la tarde del sábado 21 de octubre, en la catedral de Guadix, con el rezo solemne de las Vísperas de Domingo. La ceremonia estuvo presidida por el. Obispo accitano, Mons. Ginés García Beltrán, y contó con hermanos cofrades venidos de distintas parroquias de la diócesis.
El acto comenzó con el encendido del Cirio Pascual, para seguir con el recitado de los salmos correspondientes al día, a dos coros. Durante la homilía, el prelado manifestó su alegría al reunir en la Iglesia Madre a parte de las Hermandades y Cofradías de la Diócesis para ganar el jubileo en este Año de la Fe.
Mons. Ginés García recordó que las Hermandades tienen sólo sentido desde la fe y que son sus miembros los que deben transmitirla con ilusión y esperanza. E insistió en que hay que estar convencidos de que Jesucristo da respuesta a los interrogantes del alma. Además, señaló, desde este convencimiento hay que llenar a las Hermandades de espiritualidad.
En la homilía siguió destacando que los hermanos están para ayudar a los demás e invitó a tener "los brazos levantados" y poner en el centro lo que verdaderamente es importante en una Hermandad. Y es que el éxito de una Hermandad está precisamente en la fidelidad, dijo, a ejemplo de la Virgen María, que supo mantenerse en dicha fidelidad.
El acto terminó con la entrega del Credo a los representantes de cada una de las Hermandades y Cofradías allí presentes.