La más reciente es la que acometerá la Consejería de Cultura en la torre almenara de Canela, en Ayamonte, para convertirla en espacio expositivo, recuperándose la división interior, el antiguo pozo y mejorando toda la zona del entorno para adecuarla a las características de la edificación.
Antes de esa idea, el Ayuntamiento de Punta Umbría ya puso en valor su torre hace años para que pudiese ser visitada, y Endesa se hizo cargo del mantenimiento de la de Lepe.
En Ayamonte, el proyecto de rehabilitación de la Torre, monumento declarado bien de interés cultural, ha sido redactado por el estudio de arquitectura de Ana Mateos y destaca por restituir la bóveda que inicialmente tuvo la torre en su interior y la unificación de texturas en los paramentos exteriores. Las obras que se van a acometer por parte de la Junta a vienen a complementar las actuaciones de emergencia que hace unos años realizó el Ayuntamiento de Ayamonte para hacer accesible a los visitantes la torre.
Emblemas de la costa
La ubicación de estas torres de vigilancia es además un referente para la topografía de la zona, ya que permite conocer muchísimo mejor la orografía de la región. Ésa era la idea de Felipe II, cuando en la segunda mitad del XVI mandó construir torres de almenara en el segmento de la costa desde la desembocadura del río Guadiaro, En Cádiz, hasta el cabo de Santa María, en Faro (Portugal).