La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, considera hechos probados que los dos acusados, de 52 y 45 años, han convivido siempre con sus padres, y que en los últimos años los "han maltratado tanto física como psíquicamente, habiéndoles golpeado en alguna ocasión, despreciándolos y menospreciándolos constantemente, vejándolos y humillándolos", aunque su padre falleció en el 2006.
Los acusados reconocieron los hechos y pidieron perdón a su madre, manifestando su arrepentimiento como su compromiso de no volver a repetir estos hechos en un futuro.
Aunque en un principio el Ministerio Fiscal solicitaba una pena de dos años de cárcel para cada uno de los hermanos, y prohibición de acercarse a su madre durante cuatro años, finalmente modificó sus conclusiones al incluir la atenuante de reparación del año.
El caso ha sido tratado en un proceso de mediación, dentro de una experiencia que se lleva a cabo en este Juzgado con la colaboración de la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Jaén.
Después de que un profesional de la Asociación de Mediación para la Solución de Conflictos "Soluciona Jaén" se entrevistase con los acusados y la madre, el mediador consiguió que ambos tuvieran un encuentro y llegaran a un acuerdo con carácter previo al juicio oral en el que los acusados reconocieron el maltrato ocasionado a sus padres años atrás.
La madre aceptó las disculpas y manifestó que los acusados eran sus hijos y que actualmente "su comportamiento era muy bueno" por lo que no quería que ingresarán en prisión.
Finalmente la juez les ha condenado a diez meses y quince días de cárcel para cada uno y la prohibición de comunicarse y acercarse a su madre durante ese tiempo.
La pena de cárcel ha sido suspendida por dos años con la condición de que no delincan en ese tiempo, cumplan la prohibición de acercarse a su madre, y que realicen un programa de rehabilitación de maltratadores.