Ya estamos en plena campaña electoral otra vez. Y nuevamente sólo se habla de la Justicia para echarse los políticos en cara los muy diferentes casos en que están implicados los otros partidos, pero sin que se busquen o propongan alternativas a lo que es más importante, que es la propia situación de los Tribunales y de la Administración de Justicia y los muy diferentes problemas que le afectan. La semana pasada recibí un señalamiento de audiencia previa para septiembre de 2018, lo cual quiere decir que el posterior juicio será en el año 2020 como mínimo y entonces sólo habremos agotado la primera instancia. Si hay recuso, pues otros dos años más. Seis años para resolver una reclamación de cantidad. Y me consta que el Juzgado en cuestión trabaja todo lo que puede y más.
Pero a nadie le veo hablar de ello, y mucho menos darle la importancia que ese problema tiene y aportar soluciones concretas al respecto. Como tampoco veo que se planteen otros temas muy importantes para la Justicia, como la absurda competencia de las Comunidades Autónomas en esa materia, cuando debía ser gestionada y administrada por el Estado de forma unitaria y con una visión global de España. O el mal funcionamiento de los nuevos sistemaselectrónicos de comunicación. O la politización de determinados nombramientos de jueces por la forma en que se ha establecido su elección.
Sigo creyendo que para los políticos lo de la Justicia es algo totalmente secundario que para nada les importa y así nos va. Y a su vez lo que dicen simplemente es imposible que lo creamos a estas alturas. Ni me creo esa absurda apariencia socialdemócrata del Sr. Iglesias, ni las nuevas afirmaciones del PP ahora diciendo otra vez eso de que bajará los impuestos, ni ese empeño del Sr. Sánchez en hacer ve que su único enemigo es el PP, ni la bondad supuestamente coherente del Sr. Rivera que luego ha acabado pactando con unos y con otros. Ya nadie nos creemos eso del programa electoral, que simplemente no nos interesa porque nuestra experiencia ha comprobado que no se aplica nunca.
Pero encima tenemos que ver cómo hay sitios donde vuelve a defenderse la violencia de quienes actúan en contra de la legalidad y eso se hace nada menos que desde cargos que debían creer en que representan a otros y con ello al imperio del Estado de Derecho. No puedo sino clamar porque se respete la ley y desde luego pedir que salga lo que salga de las urnas se tomen decisiones que permitan mejorar nuestra Justicia en la medida de lo posible.
