El tiempo en: Jerez

Andalucía

Abengoa impaga 60 millones en sueldo variable a cientos de empleados

La empresa pretende que acabe el año y caduque así el derecho de cobro, pese a que las condiciones para abonarlo se han cumplido

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
  • empleados en palmas altas -
  • El grupo adeuda esa cantidad por la parte variable del sueldo de directores y mandos intermedios correspondiente a 2015

Abengoa está intentado eludir sus obligaciones de pago de la parte variable del sueldo a cientos de sus empleados ante la falta de liquidez que sigue atravesando. Según distintas fuentes internas consultadas en los últimos días, la empresa adeuda entre 50 y 60 millones de euros por el bonus correspondiente a 2015, una parte variable del salario de directores de sociedades, de plantas o mandos intermedios que en algún caso llegaba a representar un tercio del sueldo anual.

Para el cobro de este bonus, las condiciones eran que el trabajador haya trabajado el año completo (en este caso, 2015) en Abengoa; que la auditoría de la sociedad a la que estuviera vinculado saliera limpia; y que se autorizara el pago, algo que correspondía a Felipe Benjumea, expresidente, pero que salió de la empresa en febrero pasado sin autorizar esos pagos.

Sus sucesores, primero José Domínguez Abascal y luego Antonio Fornieles, gestionaron la empresa en preconcurso y obviaron ese tema. Ahora, la plantilla reclama a la nueva dirección que tome una decisión ya sobre el tema antes de que acabe el año y se extinga el derecho de cobro.


Abengoa juega también con la baza de que, de esos 60 millones como máximo, sólo 20 millones se adeudan a empleados en plantilla actualmente. Los otros 40 millones corresponden a personas que abandonaron la empresa a lo largo de 2016. Esas personas tendrían que reclamar judicialmente ese dinero, y la empresa cuenta con que no todos lo harán.

Alta dirección, sí

A cierre de 2015, según las cifras oficiales de la empresa, había en Abengoa 500 personas con la consideración de directivos; y alrededor de 2.500 más con la categoría de mandos intermedios. Un número indeterminado de personas de ambos escalones está afectada por los impagos.

En paralelo, la plantilla está muy molesta porque, al mismo tiempo que la empresa no se compromete al pago de ese bonus, sí ha firmado con varios miembros de la nueva cúpula el cobro de un sobresueldo en 2017 a cuenta del cierre de la reestructuración financiera de la empresa el mes pasado. En concreto, y en concepto de bonus de reestructuración, tres personas de la antigua cúpula recibirán  cientos de miles de euros.

Joaquín Fernández de Piérola, director general, percibirá 400.000 euros; Daniel Alaminos, secretario del consejo, otros 400.000 euros; y Álvaro Polo, director de Recursos Humanos, otros 240.000 euros. Además, Piérola negocia recibir otro bonus por permanencia en la empresa a medio plazo cuyo importe está aún por determinar.

Todo ello sumado a los 700.000 euros de salario fijo anual del director general, más otro bonus de hasta el 100% de esa cantidad; los 400.000 de Alaminos, más un variable de hasta el 70%; y los 240.000 euros para Polo, más otro bonus anual de hasta el 70%.

Además de impagar el bonus, Abengoa negocia EREs y Ertes en varias sociedades. 

La empresa dice ahora que Inabensa no se vende

Abengoa no ha puesto a la venta su filial Inabensa sino algunos activos que no forman parte de la actividad principal de esta empresa. El grupo vendió una parte de su actividad a Dominion (grupo Gestamp) y su gran taller eléctrico de Sevilla a la pequeña pyme andaluza  CEN. Inabensa sigue alquilada en esa nave y parte de sus empleados han pasado también a CEN. Tampoco tiene “intención de vender” Palmas Altas, la sede de Abengoa en Sevilla gravada con una hipoteca de casi 80 millones.

Caixabank es la entidad, en representación de todos los bancos que participan en esa hipoteca, que lidera las negociaciones para buscar inquilinos para cinco de los siete edificios del campus que estarán desocupados de aquí a dos años. Una de las opciones es trasladar allí la Ciudad de la Justicia de Sevilla, según ha publicado www.andaluciainformacion.es.

Alfonso González, presidente de Abeinsa, ha comentado estas ideas sobre Inabensa y Palmas Altas tras la firma ayer de un acuerdo de transferencia del negocio de Abentel, centrado en el diseño, la construcción y el mantenimiento de redes de telecomunicaciones, a Ericsson. Abengoa “está en la UCI”, según González, si bien en el plazo de unos días confía en que se complete totalmente el acuerdo de reestructuración de la deuda y entren nuevos fondos.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN