La rehabilitación urbana será uno de los principales yacimientos de empleo en los próximos cinco años para los arquitectos, un sector directamente afectado por la caída de la construcción, según Hernández Pezzi.
En una entrevista concedida a Efe, analizó la situación de la profesión y avanzó algunos de los ejes fundamentales del IV Congreso de Arquitectos de España, que se celebra en Valencia entre el 1 y el 3 de julio con la participación de un centenar de expertos.
Trece años después del último foro nacional de los arquitectos, la organización del certamen se ha acelerado por la crisis económica, que ha enviado al paro a un número similar de arquitectos al de los empleados del sector de la construcción.
Los visados de viviendas expedidos por colegios de arquitectos entre 2008 y 2009 han descendido un 65%, una “situación de crisis profesional que afecta no sólo a arquitectos que trabajaban en inmobiliarias”, aclaró.
La crisis golpeó especialmente a los arquitectos de vivienda libre y turística en grandes capitales y en la costa, que ha sido “la ocupación mayoritaria” en la profesión en los últimos años, mientras que “hay menos afectados” entre los que se han dedicado a concursos y la vivienda de protección oficial.
Aunque asegura que denunciaron “la burbuja inmobiliaria” ya en 2003, el presidente del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (Cscae) reconoce que los arquitectos “tenemos mucha responsabilidad” en la especulación que se ha generado en torno a la vivienda en estos últimos años.
“Hemos hecho lo que tocaba, pero tampoco puedo decir que estemos libres de toda responsabilidad”, admite, y asegura que muchos proyectos “se visaron deprisa” para eludir las exigencias constructivas que comenzarían a aplicarse con la entrada en vigor del Código Técnico de Edificación, aprobado hace tres años, en 2006.
Se han llegado a construir entre 600.000 y 700.000 viviendas anuales, y “en este campo los arquitectos tenemos mucha responsabilidad”, pero también, puntualiza, “todos, toda la sociedad española”.
Aunque en la actualidad la obra civil y los proyectos ligados al paisaje urbano están tirando de la demanda de empleo de los arquitectos, “el campo inmenso en el que tenemos mucho que decir es el de la rehabilitación”, sostiene Hernández Pezzi.
“España tiene que hacer un esfuerzo de tal calibre en la rehabilitación energética de edificios que va a haber trabajo durante los próximos cinco años”, un tiempo en el que este país debe superar el atraso que tiene frente a otros que iniciaron las reformas hace años, ha indicado.
Esta rehabilitación supondrá “un lavado de cara masiva” en centenares de miles de actuaciones para adaptar los edificios al Plan de la Vivienda, para mejorar los barrios, manzanas, las comunidades de vecinos y extender el uso de energías renovables, ha explicado.
No en vano, Hernández Pezzi espera que el congreso de Valencia imponga un “cambio de modelo” basado en “el compromiso social y ambiental de la arquitectura”, que “debe alejarse de esta etapa de pasarela y deslumbramiento”.
Para el arquitecto, “el urbanismo sigue siendo la gran asignatura pendiente, especialmente en la costa y en las islas”, donde “ha habido alegría excesiva a la hora de trabajar, ha sido algo lamentable”, critica.
No sabe si, cuando pase la crisis, volverán a construirse macrourbanizaciones como las que ocupan toda la costa mediterránea, pero tiene “la esperanza de que hayamos aprendido la lección”.
Los arquitectos, dice, deben comenzar a trabajar en una “arquitectura sostenible”, que atienda las necesidades de la sociedad y con respeto al medio ambiente.