La Semana Santa ha llegado y con ella las calificaciones escolares de niños y adolescentes de toda España. Es el momento de hacer balance y ver si el esfuerzo realizado en los últimos meses ha dado sus frutos o, si por el contrario, ha caído en saco roto. Miles de niños, junto a sus padres, durante el próximo fin de semana, celebrarán los resultados obtenidos durante este último trimestre. Pero (....)
¿será así en todos los casos?. Nos gustaría responder un sí rotundo a esta pregunta, pero lo cierto es que habrá casos en lo que no haya tanto que celebrar e, incluso casos más extremos, en los que no haya ni un ápice de celebración.
Las calificaciones escolares, un punto de inflexión para los padres españoles
Como ya hemos comentado en líneas anteriores, las calificaciones escolares de niños y adolescentes serán un punto de inflexión. El momento en el que hacer balance y observar si los esfuerzos realizados han merecido realmente la pena. En la mayoría de los casos, observaremos que los esfuerzos corresponderán a los resultados obtenidos. Sin embargo, en pequeño porcentaje, los esfuerzos realizados ni de lejos corresponderán a las calificaciones obtenidas. En este último caso, hablamos de niños y niñas quienes han dedicado largas horas al estudio y todo lo referente al ámbito escolar. Tiempo y esfuerzo, sin lugar a dudas, no recompensado.
¿Qué debemos hacer ahora?
El primer paso será determinar el origen de estas dificultades, es decir, debemos analizar realmente qué es lo que está ocurriendo. Para ello, trataremos de responder a las siguientes preguntas:
¿son niños a los que les cuesta concentrarse? ¿son niños a los que le cuesta memorizar? ¿son niños que necesitan levantarse en multitud de ocasiones mientras estudian para, por ejemplo, beber agua o ir al cuarto de baño? Si has respondido sí, a alguna de las preguntas realizadas te aconsejamos que consultes a un especialista quien determinará de manera exacta el origen de estas dificultades.
Además de lo anterior, también es importante determinar cuál o cuáles son hábitos de estudio de tu hijo o hija. La organización y planificación es tan importante o más como el estudio. Por ello, antes de comenzar cualquier tarea escolar te aconsejamos que enseñes a tus hijos a planificarse y organizarse a lo largo de la tarde, el día siguiente y la semana. ¡Avisamos que no será una tarea fácil!
¿Cómo estudian? Este es otro de las grandes interrogantes. La mayoría de escolares cuando le hacemos esta pregunta suelen responder lo siguiente:
"leo una y otra vez el texto, hasta que consigo aprendérmelo". Esto puede funcionar cuando la cantidad de información a recordar es ínfima. No obstante, a medida que el temario crece las horas invertidas son significativamente mayores. Por ello, es importante que niños y adolescentes aprendan diferentes técnicas de estudio. Técnicas que les permitirán agrupar la información en unidades más pequeñas y, en consecuencia, ser cada vez menor el material a recordar y el tiempo invertido en la tarea.
En resumidas cuentas, podríamos decir que el estudio es mucho más que sentarse frente a un libro durante un par de horas en la tarde. El estudio requiere de trabajo, esfuerzo, organización y planificación, así como la aplicación de distintas técnicas que nos permitan con el paso del tiempo reducir de forma significativa el tiempo invertido en esta tarea. Por lo tanto, es el momento de hacer balance y ser partícipes de si las calificaciones escolares son fruto de una mala organización y planificación o, si por el contrario, debemos profundizar en el aprendizaje de distintas técnicas de estudio.