La entrevista transcurre en la terraza del Bar Europa, en el Paseo Marítimo de Barbate, con el océano Atlántico golpeando la playa. Es casi un día de verano. José Manuel Miranda Domínguez aprovecha para reivindicar la belleza de este pueblo de la comarca de La Janda, su belleza y sus enormes potencialidades. Antes de que comience el cuestionario, Juan, gerente del bar, nos baja el volumen de la música, siempre excelente.
—Ha sido elegido con el 95 por ciento de los votos nuevo secretario general del PSOE de Barbate… ¿qué les dijo a los militantes una vez concluido el recuento en las urnas?
—En mi intervención hablé de lo que es la política hoy, comparando los problemas de la sociedad actual con los problemas que existían hace treinta años, que son muy similares, casi los mismos. Lo que ocurre es que hace treinta años a los políticos se nos veía como un sujeto activo capaz de resolver estos problemas, sin embargo ahora nos ven como parte del problema.
—Esa percepción está reflejada en la última encuesta del CIS…
—Efectivamente, esta encuesta se hizo pública el lunes pero mi discurso fue anterior pero refleja la misma verdad. No es algo que ocurra de la noche a la mañana, los políticos se han ganado esa percepción, nos hemos ganado esa percepción porque asumo la parte que me toca pero no la asumo entera evidentemente. Pero al mismo tiempo, creo que los políticos tenemos que trabajar para cambiar esta dinámica, algo que se logra con trabajo y cuyas soluciones pasan por escuchar a los ciudadanos, estar más cerca de los vecinos buscando soluciones a los problemas. Habrá algunos problemas que se puedan resolver y otros no, pero hay que estar en la calle. La gente te agradece que la escuche y que intentes ayudarle. Antes había políticos en cada aspecto de la sociedad, en todos los círculos, en las organizaciones, ahora ya no ocurre eso para evitar que se politicen.
—¿Cuándo más problemas hay es cuando más hacen falta los políticos?
—Por supuesto. Creo que es fundamental devolver a los ciudadanos la confianza en la política. Hay estereotipos que han calado que no son ciertos y que ha ciertos políticos les conviene decir, como eso de que todos los partidos son iguales, pero nada más lejos de la realidad como vemos en la actualidad con las políticas basadas en recortes ideológicos que ha puesto en marcha el Partido Popular. Ahora parece ser que el Estado del Bienestar es insostenible, parece ser que el Estado de las Autonomías es insostenible, que las prestaciones por desempleo son insostenibles, que la educación y la sanidad son insostenibles, y no es así, lo que hay son recortes puramente ideológicos. Se está utilizando la crisis para desmantelar el Estado de Bienestar, algo que nos costó mucho llevar a cabo. Está claro que si dejas sin protección a los más desprotegidos y en el peor momento, eso rompe con la idea de la igualdad de oportunidades. No es normal que en educación suban las tasas y bajen las becas, lo que conlleva romper con la citada igualdad de oportunidades, al igual que no es normal que se recorten las prestaciones a los parados o que desaparezcan las ayudas a la Dependencia. Y es que encima nos quieren hacer creer que no hay alternativas, pero sí que las hay porque en verdad no somos lo mismo, no es lo mismo el copago que la subasta de medicamentos, no es igual pedir un esfuerzo a los que más tienen que dejar sin prestación a los más desprotegidos. Creo que se nota en Andalucía y en países donde están gobernando con políticas de izquierda.
—Y evidentemente, esas políticas afectan a todos los pueblos y ciudades, entre ellos Barbate donde el recorte en las prestaciones por desempleo es un palo más…
—Un palo enorme no sólo en Barbate, en todos sitios. Cuando haces políticas que repercuten en los más desprotegidos llega la agitación social, que ya está presente. Yo no quiero alentar a nadie para que salga a la calle para que se manifieste, pero cuando a la gente le quita lo único que tiene para subsistir, al final tiene que echarse a la calle. Es un problema de toda la sociedad, no sólo de Barbate. En este sentido, me gustaría que todos, especialmente los políticos, hablasen más en positivo de Barbate. No podemos ser nosotros los que estemos constantemente hablando en los medios de comunicación de lo mal que está Barbate, de que estamos en un agujero sin fondo… Barbate tiene unas potencialidades únicas que no tiene nadie en nuestro entorno. Lo único que hay que hacer es que todos arrimemos el hombro, que dejemos las diferencias ideológicas para otro momento y todos vendamos Barbate con políticas en positivo. Cuando habla un partido político en los medios de comunicación es para decir lo mal que está el pueblo, pero nadie anima a los barbateños a tener autoestima, nadie habla de lo bien que se vive aquí. Por ejemplo, un día como hoy, casi de verano, sentado en una terraza del Paseo Marítimo mirando el mar… eso lo tienen muy pocos municipios de nuestra provincia. Todo lo que hay en cualquier lado, lo tenemos nosotros. Tenemos que criticar menos y hacer más.
—-“Arrimar todos el hombro”… ¿lo están cumpliendo todos los grupos políticos que conforman la Corporación Municipal?
—Siempre hay aprovechamiento político, aunque también es verdad que hay mociones beneficiosas para el pueblo que reciben el apoyo unánime de todos los grupos. Pero se aprovecha más de la cuenta el debate para sacar rentabilidad política sin medir el daño que eso puede provocar. Por ejemplo, no es cierto que Barbate sea el pueblo con más paro de España. Si se analiza los datos de forma objetiva, vemos que no es así. En Barbate ha bajado el paro durante siete meses consecutivos, desde enero hasta julio, algo que no ha logrado ningún otro municipio y nadie ha salido diciéndolo. Eso sí, los datos no son buenos, pero dentro de lo malo siempre hay que buscar lo positivo. Por lo menos yo lo intento. En cuanto a la oposición, hay cosas que están haciendo bien y otras mal. Las que hacen mal es porque actúan desde el rencor, que les nubla la vista. Por ejemplo, el PP pensaba que iba a ganar las elecciones, entre otras cosas porque cuando llegaron los comicios nosotros debíamos una serie de nóminas a los trabajadores. Además no pudimos celebrar mítines por las protestas y encima las encuestas le daban al PP unos buenos resultados. Pero volvimos a revalidad la mayoría absoluta, y ese rencor se les ve y les hacen meter la pata. Al Partido Andalucista le pasó lo mismo. Y ambos aún se preguntan cómo ganamos las elecciones y es muy sencillo, nosotros estamos con los vecinos, hablamos con ellos, llevábamos un programa electoral en positivo. Mientras que el resto de grupos estaban en la crítica constante hacia nosotros. Esta es la clave de la política, escuchar a la gente.
—-¿Qué actuaciones están llevando a cabo desde las áreas que usted gestiona (Fomento, Desarrollo Económico y Empleo)?
—Como delegado de Fomento he estado sentado en varias ocasiones con las asociaciones de empresarios y se han puesto sobre la mesa los problemas que hay que resolver y en los que tenemos que ir todos de la mano. Nosotros tenemos un problema importante como es el del suministro eléctrico. En Barbate para el desarrollo de las unidades de ejecución y para el desarrollo del propio polígono industrial tenemos unas deficiencias energéticas graves. Es un problema mayor. Otro problema es el precio del suelo industrial del municipio y aquí entran todas las administraciones. No somos competitivos en ese aspecto en comparación con nuestro entorno, lo que conlleva que los emprendedores se vayan a otras zonas. A la empresa LEC hay que hacerle un monumento por quedarse aquí. Eso está ya sobre la mesa y es en lo que estamos trabajando. Por otro lado, estoy poniendo en marcha el Consejo Económico y Social, un órgano que no ha existido nunca en este municipio y ya cuento con el beneplácito de los empresarios, y estoy pendiente de los sindicatos. La idea es que antes de que termine el año esté en funcionamiento este órgano que será ajeno a los partidos políticos. Luego en cuanto a efectivos que tiene nuestra delegación, todos están concentrados en un único edificio para aprovechar la sinergia entre ellos y para aprovechar el edificio del Vivero de Empresas.
—De todas formas, el futuro de Barbate pasa por el turismo ¿no?
—Tiene que ser así. Nosotros no podemos renunciar a nuestra idiosincrasia y a nuestro pasado como pueblo pesquero. Pero eso no es incompatible con el sector turístico. De hecho, en el nuevo PGOU hay nuevas zonas para el desarrollo hotelero que se unen a las que ya estaban pintadas. Nuestra intención es que dentro de nuestras posibilidades, dotar al pueblo de todas las infraestructuras que el turismo requiere. Sigo diciendo que hay que ver el lado positivo a todo. Es decir, aunque somos el pueblo que más está tardando en desarrollarse turísticamente, el lado positivo es que podemos evitar los errores que se han cometido en otras zonas.
—-¿Es actualmente sostenible el Ayuntamiento económicamente hablando?
—Cada vez es más sostenible, lo que ocurre es que la herencia económica en cuanto a deuda era enorme, aunque no me gusta hablar de eso. Pero era complicada la situación económica y encima ahora no tienes ayudas. Ahora bien, se está reduciendo el personal y podemos conseguir que no se den situaciones dramáticas como ya han ocurrido. Llevamos alguna nómina de retraso pero las previsiones son positivas. Haciendo una buena planificación puede haber ingresos suficientes. Por otro lado, sí hemos reducido la plantilla, lo que ocurre es que en verano tenemos que reforzar los servicios debido a que aumenta nuestra población y a que al turista hay que ofrecerle los mejores servicios posibles de playa y de limpieza viaria. Pero hablamos de contrataciones temporales. Nosotros al entrar al Ayuntamiento hace cinco años había unos 420 trabajadores y hoy contamos con 120 trabajadores menos y sin hacer mucho ruido. También hemos reducido muchísimo los gastos corrientes, como las dietas o el kilometraje.
—-¿En qué se diferenciará su gestión al frente del PSOE barbateño de la realizada por Rafael Quirós?
—Con Quirós coincido en muchos aspectos. Las ideas que él esbozó durante la campaña interna por la Secretaría General del PSOE en la provincia, son las mismas que llevo para Barbate, como por ejemplo que las casas del pueblo tienen que volver a ser lo que fueron, lugares para dinamizar la sociedad en muchos aspectos. A la gente de mi ejecutiva le he dicho que tenemos que organizar actos, la Casa del Pueblo tiene que tener vida. Cada uno tiene que aportar ideas y presentar su gestión. Luego, como señaló Quirós, es necesario separar la vida orgánica del partido de la municipal, pero al mismo tiempo tienen que estar conectadas. Es decir, las mociones deben ser debatidas por el partido que es quién decidirá las directrices políticas. En cuanto a diferencias, quizás yo tengo un poco más de tiempo libre que Quirós. Y en cuanto a actuaciones, Quirós es menos estricto que yo, sobre todo en normas de comportamiento interno. Las reuniones de la ejecutiva son de la ejecutiva, y si hay que invitar a alguien ya se llama asamblea. Quizás es porque he mamado más el partido, llevo en él desde 1996 y por eso soy un poco más antiguo en cuanto a los procedimientos, él es más espontáneo.
—Tras asumir la Secretaría General, ¿el siguiente paso es encabezar la lista del PSOE a la Alcaldía?
—No, no. No tiene nada que ver aunque no es la primera vez que me lo preguntan. Sí es verdad que en la historia del partido siempre ha ido enlazado la secretaría general con la candidatura a la Alcaldía. Pero nosotros tenemos un magnífico alcalde que debe seguir siéndolo hasta que él quiera o hasta que el pueblo quiera. Esa situación ni siquiera se plantea. Quirós estará hasta que él quiera o hasta que los ciudadanos le retiren la confianza. Es algo que consensuamos los dos hace cuatro años, la necesidad de separar el partido del grupo municipal. Una cosa no tiene por qué llevar a la otra, el secretario general no tiene por qué ser el alcalde, ni lo va a ser nunca….
